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sábado, agosto 17, 2024
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    2 Samuel 22 - Jünemann Septuaginta en español

    Cántico de liberación de David

    1. Epinicio de David Y habló David al Señor las palabras de este cantar, en el día que le salvó el Señor de mano de todos sus enemigos y de mano de Saúl;

    2. y dijo: «Señor, mi peña y mi fortaleza y mi salvador;

    3. mi Dios, mi guarda me será; confiado estaré en él. Escudador mío y cuerno de mi salud, acogedor mío y refugio mío de mi salud, del mismo me salvarás.

    4. Al Loable invocaré, al Señor; y de mis enemigos me salvaré.

    5. Que me han cercado quebrantos de muerte; torrentes de iniquidad me aterraron.

    6. Dolores puerperales de muerte(a) circundáronme; preocupáronme asperezas de muerte,

    7. Atribulándome invocaré al Señor; y a mi Dios clamaré. Y escuchará, desde su templo, mi voz y mi clamor, en sus orejas.

    8. Y turbóse y estremecióse la tierra; y los fundamentos del cielo conturbáronse y sacudiéronse, pues se airó el Señor con ellos.

    9. Subió humo, en su ira; y fuego de su boca, devorará: brasas inflamáronse por él.

    10. E inclinó cielos y descendió; y tinieblas por debajo de sus pies.

    11. Y asentóse sobre los querubines, y voló; y pareció sobre alas de viento;

    12. y puso tinieblas como escondite suyo; en torno de él, su pabellón: tinieblas de agua condensó en nubes de aire;

    13. del fulgor delante de él inflamáronse brasas de fuego.

    14. Tronó del cielo el Señor; y el Altísimo dio su voz.

    15. Y despidió dardos; y disipóles; y relampagueó relámpago y aterróles.

    16. Y aparecieron hendeduras de mar; y descubriéronse fundamentos del orbe en la increpación del Señor, por ráfaga de hálito de su furor.

    17. Envió de lo excelso, y cogióme; y extrájome de aguas muchas.

    18. Me libró de mis enemigos de poder, de los que me odiaban, pues prevalecieran sobre mí

    19. Asaltáronme días de mi tribulación; e hízome el Señor, afianzamiento mío;

    20. y sacóme a la anchura y me libró; pues complacióse en mí.

    21. Y me retribuyó el Señor según mi justicia; y según la pureza de mis manos, me retribuyó(b).

    22. Porque guardé los caminos del Señor, y no delinquí contra mi Dios.

    23. Porque todos sus juicios, por delante de mí, y sus justificaciones (c) —no me desvié de ellos.

    24. Y seré intachable para con él; y me guardaré de mi iniquidad.

    25. Y me retribuirá el Señor según mi justicia y según la pureza de mis manos por delante de sus ojos.

    26. Con santo te santificarás; y con varón perfecto te perfeccionarás.

    27. Y con elegido serás; y con perverso te pervertirás.

    28. Y al pueblo el indigente salvarás; y ojos en encumbrados humillarás.

    29. Porque tú, mi lámpara, Señor; y Señor me esplendorará mis tinieblas.

    30. Porque, en ti, correré sólo ceñido(d) y, en mi Dios, salvaré muro.

    31. El Fuerte-intachable, su camino; la palabra del Señor, poderosa, acrisolada; escudador es a todos los confiados en él.

    32. ¿Quién, fuerte, sino el Señor? y ¿quién creador será sino nuestro Dios?

    33. El Fuerte, quien me robustece con poder; y sacudió(e) inmaculada mi vía.

    34. Poniendo mis pies cual de ciervos; y sobre lo excelso colocándome.

    35. Enseñando mis manos a la guerra, y quebrantando arco broncineo en mi brazo.

    36. Y dísteme escudamiento de mi salud, y tu vida multiplicóme.

    37. Y anchura, a mis pisadas bajo de mí, y no zozobrarán mis muslos.

    38. Perseguiré a mis enemigos, y desvanecerélos y no retornaré hasta consumirlos.

    39. Y acabarélos y quebrantarélos, y no resurgirán, y caerán debajo de mis pies.

    40. Y me fortalecerás con poder a la guerra; doblegarás a mis adversarios debajo de mí.

    41. Y mis enemigos me diste de espalda, los que me odiaban, y los mataste.

    42. Clamarán —y no hay amparador— al Señor, y no les ha oído.

    43. Y los he triturado como polvo de tierra, como lodo de vías deshécholes.

    44. Y me salvarás de batalla de pueblos; me guardarás para cabeza de gentes; pueblo que no he conocido, me sirven,

    45. hijos ajenos me han halagado: a oída de aurícula oídome.

    46. Hijos ajenos se postrarán y estremecerán desde sus alcázares.

    47. ¡Vive el Señor y bendito mi Dios, el guarda mi salud!

    48. Fuerte Señor, el que me da venganzas, sometiendo pueblo debajo de mí,

    49. y sacándome de entre mis enemigos; y de entre los que se alzan contra mí, me enaltecerás, de varón de iniquidades me salvarás.

    50. Por esto, te confesaré, Señor, en las gentes, y en tu nombre cantaré,

    51. engrandeciendo las salvaciones de su rey, y haciendo misericordia a su ungido: a David y su simiente por siempre.