31.6 C
Miami
viernes, julio 19, 2024
Más


    1 Samuel 10 - Biblia Latinoamericana (1995)

    1. Samuel tomó su alcuza de aceite y la derramó sobre la cabeza de Saúl, luego lo abrazó y le dijo: "Yavé te ha consagrado como jefe de su pueblo Israel. Tú gobernarás el pueblo de Yavé y tú lo librarás de las manos de sus enemigos. ¿Quieres estar seguro de que Yavé te consagró como jefe de su heredad? Estas serán las señales:"

    2. Hoy mismo, después que me hayas dejado, hallarás a dos hombres cerca de la tumba de Raquel, en el territorio de Benjamín, ellos te dirán: "Encontraron las burras que saliste a buscar; tu padre ya no está preocupado ahora por las burras sino por ustedes, y se pregunta qué hacer por su hijo".

    3. Seguirás tu camino y llegarás a la Encina de Tabor. Allí te encontrarás con tres hombres que van al santuario de Dios en Betel. Uno llevará tres cabritos, otro, tres panes redondos, y el último, un cuero de vino.

    4. Te saludarán y te darán dos panes, los que tú aceptarás.

    5. Después llegarás a Guibea de Dios, donde hay un comisario filisteo. En cuanto entres al pueblo, te cruzarás con una banda de profetas que bajan del santuario alto con arpas, tamboriles, flautas y cítaras, en actitud de profetizar.

    6. Entonces te tomará el espíritu de Yavé y serás cambiado en otro hombre.

    7. Cuando se cumplan estas señales, tú harás lo que mejor te parezca, porque Dios está contigo.

    8. Tú llegarás primero que yo a Guilgal, y allí me reuniré contigo para ofrecer holocaustos y sacrificios de comunión. Me esperarás allí siete días y después te daré a conocer lo que tienes que hacer".

    9. Apenas Saúl volvió la espalda para alejarse de Samuel, Dios le cambió el corazón y ese mismo día se cumplieron todas las señales.

    10. Al llegar a Guibea, Saúl y su sirviente se encontraron con la banda de profetas: el espíritu de Dios se apoderó de él y se puso a profetizar en medio de ellos.

    11. Al verlo que profetizaba junto con los profetas, todos los que lo conocían de antes se decían unos a otros: "¿Qué le pasó al hijo de Quis? ¿Así que Saúl entró a los profetas?"

    12. Uno de ellos respondió: "¡De gente cuyo padre es un don nadie!" Y así fue como surgió ese refrán: "¡Saúl entró a los profetas!"

    13. Después que terminó de profetizar, regresó a su casa.

    14. Su tío les preguntó a él y a su sirviente: "¿Dónde anduvieron?" Respondió: "Hicimos un recorrido buscando las burras, pero como no las hallamos, fuimos a ver a Samuel".

    15. Su tío le dijo: "Cuéntame lo que les dijo Samuel".

    16. Saúl respondió a su tío: "Unicamente nos dijo que habían encontrado las burras". No le conversó de lo que Samuel le había dicho respecto a la realeza.

    17. Samuel convocó al pueblo junto a Yavé en Mispá.

    18. Dijo a los israelitas: "Esto dice Yavé, el Dios de Israel: "Yo saqué a Israel de Egipto, yo los libré de las manos de los egipcios y de las manos de todos los reyes que los oprimían.

    19. Pero ahora ustedes están hastiados con su Dios que los salvó de todas sus desgracias y de todas sus aflicciones; le dijeron: ¡Basta, danos un rey! Pues bien, preséntense ahora ante Yavé por tribu y por familia".

    20. Samuel ordenó entonces que se acercaran todas las tribus de Israel y la suerte recayó en la tribu de Benjamín.

    21. Ordenó que se acercaran las diferentes familias de la tribu de Benjamín y la suerte recayó en la familia de Matri. Pidió que se acercaran los hombres de la familia de Matri, y fue elegido a la suerte Saúl, hijo de Quis. Lo buscaron pero no lo encontraron.

    22. Hicieron entonces esta pregunta a Yavé: "¡Vino para acá Saúl?" Yavé respondió: "Fue a esconderse donde está el equipaje".

    23. Corrieron allá y lo trajeron para presentarlo al pueblo: ¡era más alto que todo el mundo por una cabeza!

    24. Samuel dijo a todo el pueblo: "Vean al elegido de Yavé. No hay nadie como él en todo el pueblo". Y todos lanzaron exclamaciones gritando: "¡Viva el rey!"

    25. Samuel dijo luego al pueblo cuáles eran los derechos del rey y los anotó en un libro que depositó ante Yavé; después Samuel mandó a todo el pueblo a su casa.

    26. Saúl también se fue a su casa en Guibea y algunos hombres valientes, a los que Dios les había tocado el corazón, se fueron con él.

    27. Pero hubo gente malvada que dijo: "¡Qué nos va a librar ése!" Lo despreciaron y no le ofrecieron ningún regalo.