Isaías 8 - Biblia Latinoamericana (1995)Sea Jehová vuestro temor1. Yavé me dijo: "Toma una tablilla grande y escribe encima con un punzón: "Pronto-Saqueo-Rápido-Botín". 2. Lo harás en presencia de dos testigos fidedignos, el sacerdote Urías y Zacarías, hijo de Iberequías. 3. Luego me acerqué a la profetisa, que dio a luz un hijo, y Yavé me dijo: "Ponle el nombre de "Pronto-Saqueo-Rápido-Botín", 4. porque antes de que el niño sepa decir "papá y mamá", la riqueza de Damasco y el botín de Samaria serán llevados ante el rey de Asiria. 5. Yavé me habló nuevamente y me dijo: 6. Este pueblo se ha asustado ante los reyes de Damasco y Samaria, y no hizo más caso de las aguas de Siloé que corren mansamente. 7. Pues bien, el Señor hará subir contra ellos las aguas embravecidas y profundas del río Eufrates (que es el rey de Asiria con todo su poder). ¡Ya está saliendo de su lecho y corre por todas sus riberas! 8. ¡Llega hasta Judá inundándolo todo, sus aguas le llegan hasta el cuello! Aquí está y sus alas abiertas cubren todo lo ancho de tu país, ¡oh Emmanuel! 9. Véanlo, pueblos, y sean destrozados; atrévanse, naciones lejanas. ¡Arriba! Serán destrozados. 10. Tracen un plan: fracasará; digan una palabra: no se cumplirá; porque Dios está con nosotros. 11. Esta es la advertencia que me dirigió Yavé en el momento en que me tomó de su mano y me mandó que no siguiera el camino de este pueblo. Estas fueron sus palabras: 12. No digan ustedes: ¡Conspiración!" cada vez que la gente dice: "¡Conspiración!". No teman lo que ellos temen, ni tengan miedo. 13. Yavé de los Ejércitos es el único a quien ustedes deben tener por Santo, a quien deben temer y al que tendrán miedo. 14. El es un Santuario para los dos reinos de Israel, pero también es piedra donde se tropieza y roca que hace caer. Y será como una red y una trampa para la gente de Jerusalén. 15. Es ahí donde muchos tropezarán, caerán y se quebrarán, quedarán atrapados y presos. 16. Y añadió Yavé: "Que mis discípulos guarden esta declaración cual revelación sellada. 17. Ahora, pues, esperaré en Yavé, que esconde su rostro al pueblo de Jacob; en él confío. 18. Yo y los hijos que Yavé me ha dado, somos para Israel como señales y anuncios que puso Yavé de los Ejércitos, que habita en el monte de Sión. 19. Y si les dicen a ustedes: "Consulten a los espíritus y a los adivinos que cuchichean y murmuran", respondan: "¡Por supuesto, todo pueblo debe consultar a sus dioses! ¡A ver si los muertos podrán aconsejar a los que viven!" 20. Ojalá dijeran: "Vuelvan a la Ley y las declaraciones de Dios", y estén de acuerdo con esta palabra en que no hay tinieblas. 21. Andarán vagando por el país, amargados y hambrientos, y se pondrán furiosos por el hambre, y maldecirán a su rey y a su Dios: levantarán sus ojos al cielo, 22. luego mirarán al suelo y sólo encontrarán miseria y tinieblas, oscuridad angustiosa, y no verán más que noche. |