26.4 C
Miami
sábado, agosto 17, 2024
Más


    Mateo 25 - Nacar-Colunga

    Parábola de las diez vírgenes

    1. Entonces el reino de los cielos será semejante a diez vírgenes que, tomando sus lámparas, salieron al encuentro del esposo.

    2. Cinco de ellas eran necias, y cinco prudentes;"

    3. las necias, al tomar las lámparas, no tomaron consigo aceite,

    4. mientras que las prudentes tomaron aceite en las alcuzas juntamente con sus lámparas.

    5. Como el esposo tardaba, se adormilaron y durmieron.

    6. A la medianoche se oyó un clamoreo: Ahí está el esposo; salid a su encuentro."

    7. Se despertaron entonces todas las vírgenes y se pusieron a preparar sus lámparas.

    8. Las necias dijeron a las prudentes: Dadnos aceite del vuestro, porque se nos apagan las lámparas.

    9. Pero las prudentes respondieron: No, porque podría ser que no bastase para nosotras y vosotras; id más bien a la tienda y compradlo;"

    10. pero, mientras fueron a comprarlo, llegó el esposo, y las que estaban prontas entraron con él a las bodas y se cerró la puerta.

    11. Llegaron más tarde las otras vírgenes, diciendo: Señor, señor, ábrenos.

    12. Pero él respondió: En verdad os digo que no os conozco.

    13. Velad, pues que no sabéis el día ni la hora.

    Parábola de los talentos

    14. Porque es como si uno, al emprender un viaje, llama a sus siervos y les entrega su hacienda,

    15. dando a uno cinco talentos, a otro dos y a otro uno, a cada cual según su capacidad, y se va.

    16. Luego el que había recibido cinco talentos se fue y negoció con ellos y ganó otros cinco.

    17. Asimismo el de los dos ganó otros dos.

    18. Pero el que había recibido uno se fue, hizo un hoyo en la tierra y escondió el dinero de su amo.

    19. Pasado mucho tiempo, vuelve el amo de aquellos siervos y les toma cuentas,

    20. y, llegando el que había recibido los cinco talentos, presentó otros cinco, diciendo: “Señor, tú me has dado cinco talentos; mira, pues, otros cinco que he ganado.”

    21. Y su amo le dice: “Muy bien, siervo bueno y fiel, has sido fiel en lo poco, te constituiré sobre lo mucho; entra en el gozo de tu señor.”

    22. Llegó el de los dos talentos y dijo: “Señor, dos talentos me has dado; mira otros dos que he ganado.”

    23. Díjole su señor: “Muy bien, siervo bueno y fiel; has sido fiel en lo poco, te constituiré sobre lo mucho; entra en el gozo de tu señor.”

    24. Se acercó también el que había recibido un solo talento y dijo: “Señor, tuve cuenta que eres hombre duro, que quieres cosechar donde no sembraste y recoger donde no esparciste,

    25. y, temiendo, me fui y escondí tu talento en la tierra; aquí lo tienes.”

    26. Respondióle su señor: “Siervo malo y haragán, ¿conque sabías que yo quiero cosechar donde no sembré y recoger donde no esparcí?

    27. Debías, pues, haber entregado mi dinero a los banqueros, para que a mi vuelta recibiese lo mío, con los intereses.”

    28. Quitadle el talento y dádselo al que tiene diez,

    29. porque al que tiene se le dará y abundará; pero a quien no tiene, aun lo que tiene se le quitará,"

    30. y a ese siervo inútil echadle a las tinieblas exteriores; allí habrá llanto y crujir de dientes."

    El juicio de las naciones

    31. Cuando el Hijo del hombre venga en su gloria y todos los ángeles con El, se sentarán sobre su trono de gloria.

    32. Y se reunirán en su presencia todas las gentes, y separará a unos de otros, como el pastor separa a las ovejas de los cabritos,

    33. y pondrá las ovejas a su derecha, y los cabritos a su izquierda.

    34. Entonces dirá el Rey a los que están a su derecha: Venid, benditos de mi Padre, tomad posesión del reino preparado para vosotros desde la creación del mundo.

    35. Porque tuve hambre, y me disteis de comer; tuve sed, y me disteis de beber; peregriné, y me acogisteis;"

    36. estaba desnudo, y me vestísteis; enfermo, y me visitasteis; preso, y vinisteis a verme."

    37. Y le responderán los justos: Señor, ¿cuándo te vimos hambriento y te alimentamos, sediento y te dimos de beber?

    38. ¿Cuándo te vimos peregrino y te acogimos, desnudo y te vestimos?

    39. ¿Cuándo te vimos enfermo o en la cárcel y fuimos a verte?

    40. Y el Rey les dirá: En verdad os digo que cuantas veces hicisteis eso a uno de estos mis hermanos menores, a mí me lo hicisteis.

    41. Y dirá a los de la izquierda: Apartaos de mí, malditos, al fuego eterno, preparado para el diablo y para sus ángeles.

    42. Porque tuve hambre, y no me disteis de comer; tuve sed, y no me disteis de beber;"

    43. fui peregrino, y no me alojasteis; estuve desnudo, y no me vestísteis; enfermo y en la cárcel, y no me visitasteis."

    44. Entonces ellos responderán diciendo: Señor, ¿cuándo te vimos hambriento, o sediento, o peregrino, o enfermo, o en prisión, y no te socorrimos?

    45. El les contestará diciendo: En verdad os digo que, cuando dejasteis de hacer eso con uno de estos pequeñuelos, conmigo no lo hicisteis.

    46. E irán al suplicio eterno, y los justos, a la vida eterna.