30.5 C
Miami
miércoles, julio 17, 2024
Más


    Romanos 15 - Traducción del Nuevo Mundo (Testigos de Jehová)

    1. Nosotros, pues, los que somos fuertes, debemos soportar las debilidades de los que no son fuertes, y no estar agradándonos a nosotros mismos.

    2. Cada uno de nosotros agrade a [su] prójimo en lo que es bueno para [la] edificación [de este].

    3. Porque hasta el Cristo no se agradó a sí mismo; sino que, así como está escrito: “Los vituperios de los que te vituperaban han caído sobre mí”.

    4. Porque todas las cosas que fueron escritas en tiempo pasado fueron escritas para nuestra instrucción, para que mediante nuestro aguante y mediante el consuelo de las Escrituras tengamos esperanza.

    5. Ahora, que el Dios que suministra aguante y consuelo les conceda tener entre sí la misma actitud mental que tuvo Cristo Jesús,

    6. para que, de común acuerdo, con una sola boca glorifiquen al Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo.

    El evangelio a los gentiles

    7. Por lo tanto, recíbanse con gusto unos a otros, así como el Cristo también nos recibió con gusto a nosotros, con gloria a Dios en mira.

    8. Porque digo que Cristo realmente llegó a ser ministro de los circuncisos a favor de la veracidad de Dios, para confirmar las promesas que Él hizo a los antepasados de ellos,

    9. y para que las naciones glorificaran a Dios por su misericordia. Así como está escrito: “Por eso te reconoceré abiertamente entre las naciones y ciertamente tocaré melodía a tu nombre”.

    10. Y de nuevo dice: “Alégrense, oh naciones, con su pueblo”.

    11. Y otra vez: “Alaben a Jehová, naciones todas, y alábenlo pueblos todos”.

    12. Y otra vez dice Isaías: “Habrá la raíz de Jesé, y habrá uno que se levante para gobernar naciones; en él cifrarán su esperanza naciones”.

    13. Que el Dios que da esperanza los llene de todo gozo y paz por el creer de ustedes, para que abunden en la esperanza con poder de espíritu santo.

    14. Ahora yo mismo también estoy persuadido acerca de ustedes, hermanos míos, de que ustedes mismos también están llenos de bondad por haberse llenado de todo conocimiento, y de que también pueden amonestarse unos a otros.

    15. Sin embargo, les escribo más francamente sobre algunos puntos, como dándoles un recordatorio de nuevo, a causa de la bondad inmerecida que de Dios me fue dada

    16. de ser siervo público de Cristo Jesús a las naciones, ocupándome en la obra santa de las buenas nuevas de Dios, a fin de que la ofrenda, a saber, estas naciones, resulte acepta, siendo santificada con espíritu santo.

    17. Por lo tanto, tengo causa para alborozarme en Cristo Jesús cuando se trata de cosas pertenecientes a Dios.

    18. Pues no me atreveré a decir una sola cosa si no es de aquellas cosas que Cristo obró mediante mí para que las naciones sean obedientes, por [mi] palabra y hecho,

    19. con el poder de señales y portentos presagiosos, con el poder de espíritu santo; de modo que desde Jerusalén y en un circuito hasta Ilírico he predicado cabalmente las buenas nuevas acerca del Cristo.

    20. De este modo, en realidad, me fijé como meta no declarar las buenas nuevas donde Cristo ya hubiera sido nombrado, para no estar edificando sobre fundamento ajeno;

    21. más bien, así como está escrito: “Aquellos a quienes no se les ha hecho anuncio acerca de él, verán, y los que no han oído entenderán”.

    Pablo se propone ir a Roma

    22. Por esto también se me impidió muchas veces llegar a ustedes.

    23. Pero ahora que ya no tengo territorio [sin tocar] en estas regiones, y habiendo tenido por algunos años el anhelo de llegar a ustedes,

    24. cuando viaje con rumbo a España, espero, sobre todo, cuando esté en camino a ese lugar, poder verlos y ser acompañado parte del camino por ustedes después que primero me haya satisfecho hasta cierto grado con su compañía.

    25. Pero ahora estoy para viajar a Jerusalén para servir a los santos.

    26. Porque los de Macedonia y de Acaya han tenido gusto en compartir sus cosas haciendo una contribución a los pobres de los santos [que están] en Jerusalén.

    27. Es cierto que han tenido gusto en hacerlo, y, no obstante, les eran deudores a ellos; porque si las naciones han participado de las cosas espirituales de ellos, ellas también tienen la obligación de ministrar públicamente a estos con cosas para el cuerpo carnal.

    28. Por lo tanto, cuando haya terminado esto y les haya llevado este fruto con seguridad, partiré para España y pasaré por donde están ustedes.

    29. Además, sé que cuando vaya a ustedes iré con una medida plena de la bendición de Cristo.

    30. Ahora bien, los exhorto, hermanos, por nuestro Señor Jesucristo y por el amor del espíritu, a que se esfuercen conmigo en oraciones a Dios por mí,

    31. para que yo sea librado de los incrédulos de Judea, y para que mi ministerio que es para Jerusalén resulte acepto a los santos,

    32. a fin de que cuando llegue a ustedes con gozo por la voluntad de Dios yo sea refrescado juntamente con ustedes.

    33. Que el Dios que da paz esté con todos ustedes. Amén.