30.5 C
Miami
miércoles, julio 17, 2024
Más


    1 Pedro 3 - Pablo Besso (Nuevo Testamento)

    Deberes conyugales

    1. Así mismo las mujeres, sometiéndoos a vuestros maridos, para que también si algunos no creen la palabra, por la conducta de las mujeres, sin palabra, sean ganados,

    2. observando vuestra casta conducta con respeto.

    3. Vuestro atavío no sea el exterior de rizos, adornos de oro o de lujo de vestidos

    4. sino el hombre escondido del corazón en lo incorruptible del espíritu tranquilo y manso y que es delante de Dios de gran precio.

    5. Así, en efecto, en otro tiempo también las santas mujeres que esperaban en Dios se ataviaban, sometiéndose a sus maridos,

    6. como Sara obedecía a Abraham, llamándole Señor, de la cual vosotras vinisteis a ser hijas, haciendo bien y sin ser espantadas de ningún pavor.

    7. Los varones igualmente, cohabitando juiciosamente con ellas, como con vaso femenino más débil, tratándolas con respeto, como siendo también coherederas de la gracia de la vida para que no sean estorbadas vuestras oraciones.

    Una buena conciencia

    8. Al fin sed todos unánimes, compasivos, fraternales, misericordiosos, humildes,

    9. no volviendo mal por mal o injuria por injuria, sino al contrario bendiciendo, sabiendo que a esto fuisteis llamados para que heredéis bendición,

    10. pues, el que quiere amar la vida y ver días buenos guarde su lengua del mal, y sus labios de hablar engaño,

    11. apártese del mal y haga bien, busque paz y sígala,

    12. porque los ojos del Señor sobre los justos y sus oídos atentos a sus oraciones, pero el rostro del Señor contra los que hacen mal.

    13. Y ¿quién os maltratará si de lo bueno fuereis celosos?

    14. Mas aunque padezcáis por la justicia, sois dichosos. De su temor no temáis, ni os conturbéis;

    15. santificad en vuestros corazones al Señor Dios, siempre prontos para defensa a todo hombre que os demanda razón de la esperanza que hay en vos otros, con mansedumbre y temor;

    16. teniendo buena conciencia para que en lo que os calumnian sean confundidos los que difaman vuestra buena conducta en Cristo,

    17. porque mejor es padecer, si quisiere la voluntad de Dios, obrando bien que obrando mal.

    18. Porque también Cristo una vez por los pecados padeció justo por injustos, para que nos introdujese a Dios, muerto en carne, vivificado en espíritu

    19. en el cual también se fué a los espíritus en cárcel, y les predicó

    20. a los que desobedecieron en Otro tiempo, cuando aguardaba la paciencia de Dios en los días de Noé, construyendo un arca en la cual pocos, esto es, ocho personas, fueron salvadas por agua,

    21. la cual también os salva ahora en antitipo, bautismo que no es limpiamiento de suciedad de la carne, sino demanda de buena conciencia a Dios por la resurrección de Jesu-Cristo

    22. que está a la diestra de Dios, subido al cielo, habiéndose sujetado a él ángeles, potestades y fuerzas. A