29.9 C
Miami
sábado, agosto 17, 2024
Más


    Apocalipsis 16 - Pablo Besso (Nuevo Testamento)

    Las copas de ira

    1. Y oí una voz fuerte desde el templo, que decía a los siete ángeles: Salid, y verted las copas de la ira de Dios en la tierra.

    2. Y fué el primer ángel y vertió su copa en la tierra. Y vino una úlcera mala y dañosa sobre los hombres que llevan la marca de la bestia y sobre los que dan culto a su imagen.

    3. Y el segundo ángel vertió su copa en el mar. Y se volvió sangre como de muerto, y todo animal murió que hay en el mar.

    4. Y el tercer ángel vertió su copa en los ríos y en las fuentes de las aguas. Y se volvieron sangre.

    5. Y oí al ángel de las aguas que decía: Justo eres Tú, que eres y que eras, el santo, porque juzgaste estas cosas,

    6. porque ellos derramaron sangre de santos y profetas, y sangre les diste a beber, lo merecen.

    7. Y oí al altar, que decía: Sí, Señor Dios Todopoderoso, verdaderos y justos son tus juicios.

    8. Y el cuarto ángel vertió su copa sobre el sol, fuéle dado que mar a los hombres con fuego.

    9. Y fueron quemados los hombres con gran quemadura, y blasfemaron del nombre del Dios que tiene potestad sobre estas plagas, y no se arrepintieron para darle gloria.

    10. Y el quinto ángel vertió su copa sobre el trono de la bestia; y su reino fué entenebrecido, y se mascaban del dolor la lengua,

    11. y blasfemaron contra el Dios del cielo por sus dolores y sus llagas; y no se arrepintieron de sus obras.

    12. Y el sexto ángel vertió su copa en el río grande el Eufrates ; y se secó el agua de él, para que fuese preparado el camino de los reyes que vienen del Oriente.

    13. Y vi salir de la boca del dragón y de la boca del falso profeta tres espíritus inmundos como ranas,

    14. porque son espíritus de demonios que hacen prodigios, y van a los reyes de todo el mundo para congregarlos para la batalla de aquel gran día del Dios Todopoderoso.

    15. He aquí, vengo como ladrón. Bienaventurado el que vela y guarda sus ropas para que no ande desnudo y no se vea su vergüenza.

    16. Y estos espíritus los congregaron al lugar llamado en hebreo Ar-Magedón.

    17. Y el séptimo ángel vertió su copa en el aire, y salió del templo desde el trono una grande voz, diciendo: Hecho es.

    18. Y hubo relámpagos y voces y truenos, y un terremoto grande cual no lo hubo desde que hubo hombres sobre la tierra, tan grande terremoto;

    19. y fue partida la grande ciudad en tres partes, y las ciudades de las naciones cayeron. Y la grande Babilonia fué demandada delante de Dios a darle la copa del vino del furor de su ira

    20. Y toda isla huyo, y no se hallaron montes;

    21. y granizo grande como del peso de un talento cayó del cielo sobre los hombres, y los hombres blasfemaron contra Dios por el azote del granizo porque su azote es muy grande.