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    Jeremías 48 - Reina Valera 1977

    Profecía sobre Moab

    1. Acerca de Moab. Así dice Jehová de los ejércitos, Dios de Israel: ¡Ay de Nebó!, porque fue destruida; Quiryatáyim fue avergonzada y tomada; fue confundida Misgab, y desmayó.

    2. No existe ya la alabanza de Moab; en Hesbón maquinaron mal contra ella, diciendo: Venid, y quitémosla de entre las naciones. También tú, Madmén, serás cortada; la espada irá en pos de ti.

    3. ¡Voz de clamor de Horonáyim, devastación y gran quebranto!

    4. Moab fue destruida; sus pequeños hicieron que se oyese un clamor.

    5. Porque a la subida de Luhit, suben llorando continuamente; porque a la bajada de Horonáyim, oyeron el grito desgarrador de la destrucción.

    6. Huid, salvad vuestra vida, y sed como retama en el desierto.

    7. Pues por cuanto confiaste en tus obras y en tus tesoros, tú también serás tomada; y Quemós será llevado en cautiverio, sus sacerdotes y sus príncipes juntamente.

    8. Y vendrá el destruidor a cada una de las ciudades, y ninguna ciudad escapará; será arruinado también el valle, y será destruida la llanura, como ha dicho Jehová.

    9. Dad alas a Moab, para que se vaya volando; pues serán desiertas sus ciudades, hasta no quedar en ellas morador.

    10. Maldito el que haga indolentemente la obra de Jehová, y maldito el que detenga de la sangre su espada.

    11. Tranquilo estuvo Moab desde su juventud, y sobre su sedimento ha estado reposado, y no fue vaciado de vasija en vasija, ni marchó cautivo al destierro; por tanto, quedó su sabor en él, y su aroma no se ha cambiado.

    12. Por eso vienen días, ha dicho Jehová, en que yo le enviaré trasvasadores que le trasvasarán; y vaciarán sus vasijas, y romperán sus odres.

    13. Y se avergonzará Moab de Quemós, como la casa de Israel se avergonzó de Betel, su confianza.

    14. ¿Cómo, pues, diréis: Somos hombres valientes, y robustos para la guerra?

    15. Saqueado fue Moab, y han escalado sus ciudades, y sus jóvenes escogidos descendieron al degolladero, dice el Rey, cuyo nombre es Jehová de los ejércitos.

    16. El infortunio de Moab es inminente, y su desgracia se apresura mucho.

    17. Compadeceos de él todos los que estáis alrededor suyo; y todos los que sabéis su nombre, decid: ¡Cómo se quebró la vara fuerte, el báculo hermoso!

    18. Desciende de tu gloria, siéntate en tierra seca, moradora hija de Dibón; porque el devastador de Moab subió contra ti, destruyó tus fortalezas.

    19. Párate en el camino, y observa, oh moradora de Aroer; pregunta a la que va huyendo, y a la que escapa; dile: ¿Qué ha acontecido?

    20. Se avergonzó Moab, porque fue destruido; sollozad y gritad; anunciad en Arnón que Moab está devastado.

    21. Ha llegado la sentencia a la tierra de la meseta; sobre Holón, sobre Jahaz, sobre Mefaat,

    22. sobre Dibón, sobre Nebó, sobre Bet-diblatáyim,

    23. sobre Quiryatáyim, sobre Bet-gamul, sobre Bet-meón,

    24. sobre Queriyot, sobre Bosrá y sobre todas las ciudades de tierra de Moab, las de lejos y las de cerca.

    25. Cortado es el poder de Moab, y su brazo quebrantado, dice Jehová.

    26. Embriagadle, porque contra Jehová se engrandeció; y revuélquese Moab sobre su vómito, y sea también él motivo de escarnio.

    27. ¿Pues no te fue a ti Israel por motivo de escarnio? ¿Fue sorprendido entre ladrones? Porque siempre que hablas de él meneas la cabeza.

    28. Abandonad las ciudades y habitad en peñascos, oh moradores de Moab, y sed como la paloma que hace su nido en la boca de la caverna.

    29. Hemos oído la soberbia de Moab, ¡es muy soberbio!; su arrogancia, su orgullo, su altivez y la altanería de su corazón.

    30. Yo conozco, dice Jehová, su presunción, que no tiene base, y sus bravatas, que no han servido para nada de provecho.

    31. Por tanto, yo aullaré sobre Moab; sobre todo Moab haré clamor, y sobre los hombres de Kir-heres gemiré.

    32. Con llanto mayor que el de Jazer lloraré por ti, oh vid de Sibmá; tus sarmientos pasaron el mar, llegaron hasta el mar de Jazer; sobre tu cosecha y sobre tu vendimia vino el saqueador.

    33. Y fue cortada la alegría y el regocijo de los campos fértiles, y de la tierra de Moab; y de los lagares hice que faltase el vino; no pisarán con canción; la canción no será canción.

    34. El clamor de Hesbón llega hasta Elealé; hasta Jahaz dieron su voz; desde Zoar hasta Horonáyim, becerra de tres años; porque también las aguas de Nimrim se convertirán en un desierto.

    35. Y exterminaré de Moab, dice Jehová, a quien sacrifique sobre los lugares altos, y a quien ofrezca incienso a sus dioses.

    36. Por tanto, mi corazón resuena como flautas por causa de Moab, asimismo resuena mi corazón a modo de flautas por los hombres de Kir-heres; porque perecieron las riquezas que habían hecho.

    37. Porque toda cabeza está rapada, y toda barba raída; sobre toda mano hay rasguños, y cilicio sobre todo lomo.

    38. Sobre todos los terrados de Moab, y en sus calles, llanto por doquier; porque yo quebranté a Moab como a vasija desechada, dice Jehová.

    39. ¡Lamentad! ¡Cómo ha sido quebrantado! ¡Cómo volvió la espalda Moab con vergüenza! Fue Moab objeto de escarnio y de espanto a todos los que están en sus alrededores.

    40. Porque así dice Jehová: He aquí que como águila volará, y extenderá sus alas contra Moab.

    41. Tomadas son las ciudades, y ocupadas las fortalezas; y será aquel día el corazón de los valientes de Moab como el corazón de mujer en angustia de parto.

    42. Y Moab será destruido hasta dejar de ser pueblo, porque se engrandeció contra Jehová.

    43. Terror y hoyo y lazo contra ti, oh morador de Moab, dice Jehová.

    44. El que huya del terror, caerá en el hoyo, y el que salga del hoyo, será preso en el lazo; porque yo traeré sobre él, sobre Moab, el año de su castigo, dice Jehová.

    45. A la sombra de Hesbón se pararon sin fuerzas los que huían; pues salió fuego de Hesbón, y llama de en medio de Sehón, y quemó las sienes de Moab, y la coronilla de los hijos revoltosos.

    46. ¡Ay de ti, Moab!, pereció el pueblo de Quemós; porque tus hijos fueron puestos presos para cautividad, y tus hijas para cautiverio.

    47. Pero haré volver a los cautivos de Moab en lo postrero de los tiempos, dice Jehová. Hasta aquí es la sentencia sobre Moab.