Job 4 - Reina Valera 1977Elifaz reprende a Job1. Entonces respondió Elifaz temanita, y dijo: 2. Si intentamos hablarte, te será molesto; Pero ¿quién podrá contener las palabras? 3. He aquí, tú instruías a muchos, Y fortalecías las manos débiles; 4. Al que tropezaba lo enderezaban tus palabras, Y reforzabas las rodillas que decaían. 5. Mas ahora que el mal ha venido sobre ti, te desalientas; Y cuando ha llegado hasta ti, te turbas. 6. ¿No es tu temor de Dios tu confianza? ¿No es tu esperanza la integridad de tus caminos? 7. Recapacita ahora; ¿qué inocente jamás ha perecido? ¿Y dónde han sido destruidos los rectos? 8. Según todo lo que yo he visto, los que aran iniquidad Y siembran injuria, la siegan. 9. Perecen bajo el soplo de Dios, Y por el furor de su ira son consumidos. 10. Los rugidos del león, y los bramidos del rugiente, Y los dientes de los leoncillos son quebrantados. 11. El león viejo perece por falta de presa, Y los hijos de la leona se dispersan. 12. Ahora bien, me fue dicha una palabra en secreto, Y mi oído ha percibido algo de ello. 13. En cavilaciones de visiones nocturnas, Cuando el sueño cae sobre los hombres, 14. Me sobrevino un espanto y un temblor, Que estremeció todos mis huesos; 15. Y al pasar un espíritu por delante de mí, Hizo que se erizara el pelo de mi cuerpo. 16. Paróse delante de mis ojos una figura, Cuyo rostro yo no conocí, Y tras un silencio, oí que susurraba: 17. ¿Será justo un hombre delante de Dios? ¿Será puro un varón frente a su Hacedor? 18. He aquí, en sus siervos no confía, Y notó necedad en sus ángeles; 19. ¡Cuánto más en los que habitan en casas de barro, Cuyos cimientos están en el polvo, Y que serán quebrantados antes que la polilla! 20. De la mañana a la tarde son destruidos, Y se pierden para siempre, sin haber quien repare en ello. 21. La estaca de su tienda ¿no es arrancada con ellos mismos? Y mueren sin haber adquirido sabiduría. |