30.5 C
Miami
lunes, agosto 19, 2024
Más


    Salmos 40 - Reina Valera 1977

    Alabanza por la liberación divina (Sal. 70.1-5) Al músico principal. Salmo de David.

    1. Al músico principal. Salmo de David. Pacientemente esperé en Jehová, Se inclinó hacia mí, y escuchó mi clamor.

    2. Me extrajo del pozo de la desesperación, del lodo cenagoso; Afianzó mis pies sobre una roca, y consolidó mis pasos.

    3. Puso luego en mi boca cántico nuevo, un himno de alabanza a nuestro Dios. Verán esto muchos, y temerán, Y confiarán en Jehová.

    4. Bienaventurado el hombre que puso en Jehová su confianza, Y no mira a los rebeldes, ni a los que se desvían tras la mentira.

    5. Has multiplicado, oh Jehová Dios mío, tus maravillas; Y en tus designios para con nosotros, No hay nadie comparable a ti. Yo querría anunciarlos y hablar de ellos, Pero no pueden ser enumerados.

    6. Sacrificios y ofrendas no te agradaron; Has horadado mis orejas; No deseabas holocausto ni expiación.

    7. Entonces dije: Aquí estoy; En el rollo del libro está escrito de mí;

    8. El hacer tu voluntad, Dios mío, me ha agradado, Y tu ley está en medio de mi corazón.

    9. He proclamado tu justicia en la gran congregación; He aquí, no refrené mis labios, Jehová, tú lo sabes.

    10. No encubrí tu justicia dentro de mi corazón; He publicado tu fidelidad y tu salvación; No oculté tu misericordia y tu verdad a la gran asamblea.

    11. Jehová no retengas tus misericordias hacia mí; Tu misericordia y tu verdad me guarden siempre.

    12. Porque me han rodeado males sinnúmero; Me han alcanzado mis maldades, y no puedo levantar la vista. Se han aumentado más que los cabellos de mi cabeza, y mi valor me falla.

    13. Dígnate, oh Jehová, librarme; Jehová, apresúrate a socorrerme.

    14. Sean avergonzados y confundidos a una Los que buscan mi vida para destruirla. Vuelvan las espaldas y avergüéncense Los que desean mi mal;

    15. Queden consternados en pago de su afrenta Los que me dicen: ¡Ja, ja!

    16. Gócense y alégrense en ti todos los que te buscan, Y repitan sin cesar los que aman tu salvación: Jehová sea enaltecido.

    17. Aunque yo estoy afligido y necesitado, Jehová pensará en mí. Mi ayuda y mi libertador eres tú; Dios mío, no te tardes.