Jeremías 13 - Reina Valera 1995La señal del cinto podrido1. [1] Así me dijo Jehová: "Ve y cómprate un cinto de lino.[2] Cíñelo a tu cintura, pero no lo metas en agua". 2. Compré el cinto, conforme a la palabra de Jehová, y lo ceñí a mi cintura. 3. Vino a mí por segunda vez palabra de Jehová, diciendo: 4. "Toma el cinto que compraste, el cual ciñe tu cintura, levántate, ve al Éufrates[3] y escóndelo allí, en la hendidura de una peña". 5. Fui, pues, al Éufrates y lo escondí, como Jehová me había mandado. 6. Después de muchos días me dijo Jehová: "Levántate, ve al Éufrates y toma el cinto que te mandé esconder allí". 7. Entonces fui al Éufrates, cavé y tomé el cinto del lugar donde lo había escondido, pero el cinto se había podrido y ya no servía para nada.[4] 8. Y vino a mí palabra de Jehová, diciendo: 9. "Así ha dicho Jehová: Así haré podrir la soberbia de Judá y la mucha soberbia de Jerusalén. 10. Este pueblo malo, que no quiere escuchar mis palabras, que anda en las imaginaciones de su corazón y que va en pos de dioses ajenos para servirlos y para postrarse ante ellos, vendrá a ser como este cinto, que ya no sirve para nada. 11. Porque como el cinto se ajusta a la cintura del hombre, así hice que se ajustara a mí toda la casa de Israel y toda la casa de Judá, dice Jehová, para que fueran mi pueblo, y para renombre, para alabanza y para honra; pero no escucharon.[5] La señal de las tinajas llenas12. "Les dirás, pues, esta palabra: "Así ha dicho Jehová, Dios de Israel: Toda tinaja se llenará de vino".[6] Y ellos te dirán: "¿No sabemos que toda tinaja se llenará de vino?" 13. Entonces les dirás: Así ha dicho Jehová: "Yo lleno de embriaguez[7] a todos los habitantes de esta tierra, a los reyes de la estirpe de David que se sientan sobre su trono, a los sacerdotes y profetas y a todos los habitantes de Jerusalén. 14. Y los quebrantaré, a los unos contra los otros, juntamente a los padres y a los hijos, dice Jehová. No perdonaré, ni tendré piedad ni misericordia, sino que los destruiré"".[8] Judá será llevada en cautiverio15. Oíd y prestad atención: no os envanezcáis,pues Jehová ha hablado. 16. Dad gloria a Jehová, vuestro Dios, antes que haga venir tinieblas, antes que vuestros pies tropiecenen montes de oscuridad, y que, esperando vosotros la luz, él os la vuelva en sombra de muertey tinieblas.[9] 17. Mas si no escucháis esto, en secreto llorará mi almaa causa de vuestra soberbia; y llorando amargamente,se desharán mis ojos en lágrimas, porque el rebaño de Jehováfue hecho cautivo. 18. "Di al rey[10] y a la reina:[11] "Humillaos, sentaos en tierra, porque la corona de vuestra gloriaha caído de vuestras cabezas". 19. Las ciudades del Neguev[12] fueron cerradas y no hubo quien las abriera; toda Judá fue deportada, llevada en cautiverio fue toda ella. 20. Alzad vuestros ojos y ved a los que vienen del norte.[13] ¿Dónde está el rebaño que te fue dado, tu hermosa grey? 21. "¿Qué dirás cuando él pongacomo cabeza sobre ti a aquellos a quienes tú enseñastea ser tus amigos? ¿No te darán dolores como los de una mujer que está de parto?[14] 22. Quizá digas en tu corazón: "¿Por qué me ha sobrevenido esto?" ¡Por la enormidad de tu maldad fueron alzadas tus faldas, fueron desnudados tus calcañares![15] 23. ¿Podrá cambiar el etíope[16] su piel y el leopardo sus manchas?[17] Así también, ¿podréis vosotros hacer el bien, estando habituados a hacer lo malo? 24. Por tanto, yo los esparciréal viento del desierto, como tamo que pasa.[18] 25. Esta es tu suerte, la porción que yo he medido para ti, dice Jehová, porque te olvidaste de mí y confiasteen la mentira. 26. Yo, pues, te alzaré también las faldas hasta el rostro, y se verá tu [email protected]:[19] 27. tus adulterios, tus relinchos, la maldad de tu fornicación[20] sobre los collados.[21] En el campo he visto tus abominaciones. ¡Ay de ti, Jerusalén! ¿No serás al fin limpia? ¿Cuánto tardarás en purificarte?" |