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miércoles, julio 17, 2024
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    Daniel 12 - Reina Valera 2000

    El tiempo del fin

    1. Mas en aquel tiempo se levantará Miguel, el gran príncipe que está por los hijos de tu pueblo; y será tiempo de angustia, cual nunca fue después que hubo gente hasta entonces; mas en aquel tiempo tu pueblo escapará, todos los que se hallaren escritos en el libro.

    2. Y muchos de los que duermen en el polvo de la tierra serán despertados, unos para vida eterna, y otros para vergüenza y confusión perpetua.

    3. Y los entendidos resplandecerán como el resplandor del firmamento; y los que enseñan la justicia [a] la multitud, como las estrellas a perpetua eternidad.

    4. Tú, pues, Daniel, cierra las palabras y sella el libro hasta el tiempo del fin; pasarán muchos, y se multiplicará la ciencia.

    5. Y yo, Daniel, miré, y he aquí otros dos que estaban, el uno a este lado a la orilla del río, y el otro al otro lado a la orilla del río.

    6. Y dijo [uno] al Varón vestido de lienzos, que estaba sobre las aguas del río: ¿Cuándo [será] el fin de estas maravillas?

    7. Y oía al Varón vestido de lienzos, que [estaba] sobre las aguas del río, el cual alzó su diestra y su siniestra al cielo, y juró por el Viviente en los siglos, que [será] por tiempo, tiempos, y la mitad. Y cuando se acabare el esparcimiento del poder del pueblo santo, todas estas cosas serán cumplidas.

    8. Y yo oí, mas no entendí. Y dije: Señor mío, ¿qué [es] el cumplimiento de estas cosas?

    9. Y dijo: Anda, Daniel, que estas palabras serán cerradas y selladas hasta el tiempo del cumplimiento.

    10. Muchos serán limpios, y emblanquecidos, y purgados. Y [los] impíos se empeorarán, y ninguno de los impíos entenderá, pero entenderán los entendidos.

    11. Y desde el tiempo que fuere quitado el continuo [sacrificio] hasta la abominación de asolamiento, [habrá] mil doscientos noventa días.

    12. Bienaventurado el que esperare, y llegare hasta mil trescientos treinta y cinco días.

    13. Y tú irás al fin, y reposarás, y te levantarás en tu suerte ([o en tu herencia]) al fin de los días.