Proverbios 7 - Reina Valera 2000Las artimañas de la ramera1. Hijo mío, guarda mis razones, y encierra contigo mis mandamientos. 2. Guarda mis mandamientos, y vivirás; y mi ley como las niñas de tus ojos. 3. Lígalos a tus dedos; escríbelos en la tabla de tu corazón. 4. Di a la sabiduría: Tú [eres] mi hermana; y a la inteligencia llama parienta, 5. para que te guarden de la mujer ajena, y de la extraña que ablanda sus palabras. 6. Porque mirando yo por la ventana de mi casa, por mi celosía, 7. vi entre los simples, consideré entre los jóvenes, [un] joven falto de entendimiento, 8. el cual pasaba por la calle, junto a la esquina de aquella, e iba camino de su casa; 9. a la tarde del día, ya que oscurecía; en la oscuridad y tiniebla de la noche. 10. Y he aquí, [una] mujer que le sale al encuentro con atavío de ramera, guardada de corazón, 11. alborotadora y rencillosa, sus pies no pueden estar en casa; 12. unas veces de fuera, o bien por las plazas, acechando por todas las esquinas. 13. Y traba de él, y lo besa; desvergonzó su rostro, y le dijo: 14. Sacrificios de paz había prometido, hoy he pagado mis votos; 15. por tanto he salido a encontrarte, buscando tu rostro, y te he hallado. 16. Con paramentos he ataviado mi cama, recamados con cordoncillo de Egipto. 17. He sahumado mi cámara con mirra, áloes, y canela. 18. Ven, embriaguémonos de amores hasta la mañana; alegrémonos en amores. 19. Porque el marido no está en casa, se ha ido a un largo viaje; 20. el saco de dinero llevó en su mano, el día de la fiesta volverá a su casa. 21. Lo derribó con la mucha suavidad de sus palabras, con la blandura de sus labios lo persuadió. 22. Se va en pos de ella luego, como va el buey al degolladero, y como el loco a las prisiones para ser castigado; 23. de tal manera que la saeta traspasó su hígado; como el ave que se apresura al lazo, y no sabe que es contra su vida. 24. Ahora pues, hijos, oídme, y estad atentos a las razones de mi boca. 25. No se aparte a sus caminos tu corazón; no yerres en sus veredas. 26. Porque a muchos ha hecho caer muertos; y todos los fuertes han sido muertos por ella. 27. Caminos del sepulcro son su casa, que descienden a las cámaras de la muerte. |