Romanos 12 - Reina Valera 2000Deberes cristianos1. Así que, hermanos, os ruego por las misericordias de Dios, que presentéis vuestros cuerpos en sacrificio vivo, santo, agradable a Dios, [que es] vuestro racional culto. 2. Y no os conforméis a este siglo; mas trasformaos por la renovación de vuestra alma, para que experimentéis cuál sea la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta. 3. Digo pues por la gracia que me es dada, a todos los que están entre vosotros, que no sepan más de lo que conviene saber; mas que sepan con templanza, cada uno conforme a la medida de fe que Dios repartió. 4. Porque de la manera que en un cuerpo tenemos muchos miembros, sin embargo todos los miembros no tienen la misma operación; 5. así muchos somos un cuerpo en el Cristo, mas todos miembros los unos de los otros. 6. De manera que, teniendo diferentes dones según la gracia que nos es dada; si es profecía, conforme a la medida de la fe; 7. o ministerio, en servir; o el que enseña, en doctrina; 8. el que exhorta, en exhortar; el que reparte, [hágalo] en simplicidad; el que preside, en solicitud; el que hace misericordia, en alegría. 9. El amor [sea] sin fingimiento, aborreciendo lo malo, llegándoos a lo bueno; 10. amando la caridad de la hermandad los unos con los otros; previniéndoos con honra los unos a los otros; 11. en el cuidado no perezosos; ardientes en [el] Espíritu; sirviendo al Señor; 12. gozosos en la esperanza; sufridos en la tribulación; constantes en la oración; 13. compartiendo para las necesidades de los santos; siguiendo la hospitalidad. 14. Bendecid a los que os persiguen; bendecid y no maldigáis. 15. Gozaos con los que se gozan; llorad con los que lloran. 16. Unánimes entre vosotros; no altivos, mas acomodándoos a los humildes. No seáis sabios en vuestra [propia] opinión. 17. No pagando a nadie mal por mal; procurando lo bueno no sólo delante de Dios, mas aun delante de todos los hombres. 18. Si se puede hacer, cuanto es [posible] en vosotros, tened paz con todos los hombres. 19. No defendiéndoos a vosotros mismos, amados; antes dad lugar a la ira [de Dios], porque escrito está: Mía es la venganza; yo pagaré, dice el Señor. 20. Así que, si tu enemigo tuviere hambre, dale de comer; si tuviere sed, dale de beber: que haciendo esto, ascuas de fuego amontonas sobre su cabeza. 21. No seas vencido de lo malo; mas vence con el bien el mal. |