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jueves, julio 18, 2024
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    Salmos 9 - Reina Valera 2000

    Acción de gracias por la justicia de Dios Al músico principal; sobre Mut-labén. Salmo de David.

    1. Al Vencedor: sobre Mut-labén: Salmo de David. [Te] alabaré, oh SEÑOR, con todo mi corazón; contaré todas tus maravillas.

    2. Me alegraré y me regocijaré en ti; cantaré a tu nombre, oh Altísimo;

    3. por haber sido mis enemigos vueltos atrás; caerán y perecerán delante de ti.

    4. Porque has hecho mi juicio y mi causa; te has sentado en silla juzgando justicia.

    5. Reprendiste [los] gentiles, destruiste al malo, raíste el nombre de ellos para siempre y eternalmente.

    6. Oh enemigo, acabados son para siempre los asolamientos; y las ciudades [que] derribaste, su memoria pereció con ellas.

    7. Mas el SEÑOR permanecerá para siempre; ha dispuesto su trono para juicio.

    8. Y él juzgará el mundo con justicia; juzgará los pueblos con rectitud.

    9. Y será el SEÑOR refugio al humilde, refugio para el tiempo de angustia.

    10. Y en ti confiarán los que conocen tu nombre; por cuanto [tú], oh SEÑOR, no desamparaste a los que te buscaron.

    11. Cantad al SEÑOR, el que habita en Sion. Noticiad en los pueblos sus obras.

    12. Porque demandando la sangre se acordó de ellos; no se olvidó del clamor de los humildes.

    13. Ten misericordia de mí, SEÑOR. Mira mi aflicción [que padezco] de los que me aborrecen, tú que me levantas de las puertas de la muerte;

    14. para que cuente yo todas tus alabanzas en las puertas de la hija de Sion, y me goce en tu salud.

    15. Se hundieron los gentiles en la fosa que hicieron; en la red que escondieron fue tomado su pie.

    16. El SEÑOR fue conocido [en] el juicio que hizo; en la obra de sus manos fue enlazado el malo. (Meditación para siempre. Selah.)

    17. Los malos volverán al sepulcro; todos los gentiles que se olvidan de Dios.

    18. Porque no para siempre será olvidado el humilde; ni la esperanza de los pobres perecerá para siempre.

    19. Levántate, oh SEÑOR; no se fortalezca el hombre; sean juzgadas los gentiles delante de ti.

    20. Pon, oh SEÑOR, temor en ellos: conozcan los gentiles que son hombres. (Selah.)