30.4 C
Miami
domingo, agosto 18, 2024
Más


    Jeremías 24 - Reina Valera 2004

    La señal de los higos buenos y malos

    1. Y HE aquí que Jehová me mostró dos cestas de higos puestas delante del templo de Jehová, después que Nabucodonosor, rey de Babilonia, había llevado cautivos a Jeconías hijo de Joacim, rey de Judá, y a los príncipes de Judá, y a los oficiales y herreros de Jerusalem, y haberlos llevado a Babilonia.

    2. Una cesta tenía higos muy buenos, como brevas; y la otra cesta tenía higos muy malos, que no se podían comer de malos.

    3. Y me dijo Jehová: ¿Qué ves tú, Jeremías? Y dije: Higos, higos buenos, muy buenos; y malos, muy malos, que de malos no se pueden comer.

    4. Y vino a mí palabra de Jehová, diciendo:

    5. Así dice Jehová Dios de Israel: Como a estos buenos higos, así consideraré a los transportados de Judá al cual eché de este lugar a tierra de caldeos, para bien.

    6. Porque pondré mis ojos sobre ellos para bien, y los volveré a esta tierra; y los edificaré, y no los destruiré: los plantaré, y no los arrancaré.

    7. Y les daré corazón para que me conozcan, que yo soy Jehová: y me serán por pueblo, y yo les seré a ellos por Dios; porque se volverán a mí de todo su corazón.

    8. Y como los malos higos, que de malos no se pueden comer, así, ha dicho Jehová, daré a Sedequías rey de Judá, y a sus príncipes, y al resto de Jerusalem que quedaron en esta tierra, y que moran en la tierra de Egipto.

    9. Y los daré por escarnio, por mal a todos los reinos de la tierra: por infamia, y por ejemplo, y por refrán, y por maldición a todos los lugares adonde yo los arrojaré.

    10. Y enviaré sobre ellos espada, hambre, y pestilencia, hasta que sean acabados de sobre la tierra que les di a ellos y a sus padres.