30.3 C
Miami
domingo, julio 21, 2024
Más


    Salmos 104 - Reina Valera Gómez (2010)

    Dios cuida de su creación

    1. Bendice, alma mía, a Jehová. Jehová, Dios mío, mucho te has engrandecido; te has vestido de gloria y de magnificencia.

    2. El que se cubre de luz como de vestidura, que extiende los cielos como una cortina;

    3. que establece sus aposentos entre las aguas; el que hace de las nubes su carruaje, el que anda sobre las alas del viento;

    4. el que hace a sus ángeles espíritus, sus ministros fuego flameante.

    5. Él fundó la tierra sobre sus cimientos; no será jamás removida.

    6. Con el abismo, como con vestido, la cubriste; sobre los montes estaban las aguas.

    7. A tu reprensión huyeron; al sonido de tu trueno se apresuraron;

    8. subieron los montes, descendieron los valles, al lugar que tú les fundaste.

    9. Les pusiste término, el cual no traspasarán; ni volverán a cubrir la tierra.

    10. Tú eres el que envías las fuentes por los arroyos; van entre los montes.

    11. Abrevan a todas las bestias del campo; mitigan su sed los asnos monteses.

    12. Junto a ellos habitarán las aves de los cielos, que elevan su trino entre las ramas.

    13. El que riega los montes desde sus aposentos; del fruto de sus obras se sacia la tierra.

    14. El que hace producir el pasto para las bestias, y la hierba para el servicio del hombre; para que saque el pan de la tierra.

    15. Y el vino que alegra el corazón del hombre, y el aceite que hace lucir el rostro, y el pan que sustenta el corazón del hombre.

    16. Se llenan de savia los árboles de Jehová, los cedros del Líbano que Él plantó.

    17. Allí anidan las aves; en las hayas hace su casa la cigüeña.

    18. Los montes altos para las cabras monteses; las peñas, madrigueras para los conejos.

    19. Hizo la luna para los tiempos; el sol conoce su ocaso.

    20. Pones las tinieblas, y es la noche; en ella corretean todas las bestias de la selva.

    21. Los leoncillos rugen tras la presa, y buscan de Dios su comida.

    22. Sale el sol, se recogen, y se echan en sus cuevas.

    23. Sale el hombre a su labor, y a su labranza hasta la tarde.

    24. ¡Cuán numerosas son tus obras, oh Jehová! Hiciste todas ellas con sabiduría; la tierra está llena de tus beneficios.

    25. He allí el grande y anchuroso mar; en él hay innumerables peces, animales pequeños y grandes.

    26. Allí andan navíos; allí este leviatán que hiciste para que jugase en él.

    27. Todos ellos esperan en ti, para que les des su comida a su tiempo.

    28. Les das, recogen; abres tu mano, se sacian de bien.

    29. Escondes tu rostro, se turban; les quitas el hálito, dejan de ser, y vuelven al polvo.

    30. Envías tu Espíritu, son creados; y renuevas la faz de la tierra.

    31. La gloria de Jehová será para siempre; Jehová se alegrará en sus obras;

    32. el cual mira a la tierra, y ella tiembla; toca los montes, y humean.

    33. A Jehová cantaré en mi vida; a mi Dios cantaré salmos mientras viva.

    34. Dulce será mi meditación en Él: Yo me alegraré en Jehová.

    35. Sean consumidos de la tierra los pecadores, y los impíos dejen de ser. Bendice, oh alma mía, a Jehová. Aleluya.