Job 29 - Serafín de Ausejo 1975

Job recuerda su felicidad anterior

1. Job siguió en el uso de la palabra y dijo:

2. "¡Quién me diera vivir como antaño, como en los días en que Dios me protegía,

3. cuando sobre mi cabeza lucía su antorcha y su resplandor me guiaba en las tinieblas;

4. como fui en los días de mi otoño, cuando Dios protegía mi tienda,

5. cuando Sadday estaba conmigo y mis hijos me rodeaban;

6. cuando mis pies se lavaban en leche, y ríos de aceite brotaban de la piedra!

7. Cuando yo salía a la puerta de la ciudad o colocaba mi asiento en la plaza,

8. los jóvenes, al verme, se retiraban, y los ancianos se quedaban en pie,

9. los notables contenían sus palabras y se ponían la mano en la boca.

10. Se apagaba la voz de los jefes, y su lengua se pegaba al paladar.

11. Oído que me oía, me felicitaba; ojos que me veían, daban testimonio de mí,

12. porque libré al pobre que clamaba y al huérfano falto de ayuda.

13. A mí subía la bendición del desvalido y yo regocijaba el corazón de la viuda.

14. Me vestí de justicia como con un vestido, tenía la equidad por manto y turbante.

15. Ojos fui para el ciego y pies para el cojo.

16. Para los indigentes fui padre, examiné la causa del desconocido.

17. Rompí las mandíbulas al malvado, de entre los dientes le arranqué la presa.

18. Yo me decía: Moriré en mi nido, multiplicaré mis días como el ave fénix.

19. Mi raíz se extiende hasta las aguas, en mis ramas se posa el rocío nocturno.

20. Conservaré lozana mi gloria y en mi mano mi arco renovará su fuerza.

21. Me escuchaban con gran atención, en silencio, para oír mi parecer.

22. A mis palabras nadie replicaba, sobre ellos mi discurso caía gota a gota.

23. Me esperaban igual que se espera la lluvia, abrían su boca como al agua tardía.

24. Si les sonreía, cobraban ánimo; no se perdían la luz de mi rostro.

25. Yo les señalaba el camino, los guiaba; yo estaba como un rey en medio de sus huestes, como quien consuela a los afligidos.