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jueves, julio 18, 2024
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    Proverbios 20 - Serafín de Ausejo 1975

    1. El vino es insolente; el licor, pendenciero; quien a ellos se entrega no es sabio.

    2. Como rugido de león es la ira del rey: quien lo provoca arriesga su vida.

    3. Es honor para el hombre evitar las rencillas, pero el insensato se mete en ellas.

    4. El perezoso no ara en el otoño; busca luego en la siega, pero en vano.

    5. Agua profunda son los proyectos humanos: el hombre sensato sabe acabarlos.

    6. Muchos hombres se proclaman amigos; pero un hombre fiel, ¿quién lo hallará?

    7. El justo camina en su integridad. ¡Dichosa será su descendencia!

    8. El rey sentado en el tribunal discierne todo mal con su mirada.

    9. ¿Quién puede decir: "Purifiqué mi corazón, estoy limpio de mi culpa?".

    10. Dos pesos y dos medidas: ambas cosas las abomina Yahveh.

    11. Por sus actos el niño ya demuestra si será pura y recta su conducta.

    12. El oído que oye y el ojo que mira: ambas cosas las hizo Yahveh.

    13. No ames el sueño: te empobrecerías; ten abiertos los ojos: te hartarás de pan.

    14. ¡Malo, malo!, dice el que compra; pero al marchar se congratula.

    15. Hay oro y multitud de perlas; pero el mejor tesoro son los labios sensatos.

    16. Quítale el vestido, pues avaló a un extraño; embárgale, pues salió fiador de un desconocido.

    17. Sabroso es al hombre el pan robado, pero luego se le llena la boca de grava.

    18. Los proyectos necesitan consejo: haz la guerra con gran reflexión.

    19. Quien anda intrigando descubre secretos: no te asocies con quien mucho habla.

    20. Quien desprecia al padre y a la madre, verá morir su lámpara en densas tinieblas.

    21. La fortuna amasada con presteza no será al final bendecida.

    22. No digas: "Pagaré mal con mal"; confía en Yahveh, y él te ayudará.

    23. Usar dos pesos lo abomina Yahveh, la balanza falsa no está bien.

    24. Yahveh dirige los pasos del hombre; ¿cómo sabrá el hombre su propio camino?

    25. El hombre se enreda si dice a la ligera: "Esto es santo", para luego arrepentirse de lo prometido.

    26. El rey sabio avienta a los malvados, hace pasar el trillo sobre ellos.

    27. Yahveh vigila el espíritu del hombre, penetra todos los rincones de su ser.

    28. Bondad y lealtad protegen al rey; apoya su trono en la justicia.

    29. La gloria de los jóvenes es su fuerza; gala de los ancianos son su canas.

    30. Las huellas del azote purifican la intención; los golpes, el fondo del corazón.