Mateo 24 - La Biblia Textual 3a EdicionJesús predice la destrucción del templo1. Y saliendo Jesús, se iba del templo, cuando sus discípulos se acercaron para mostrarle las edificaciones del templo. 2. Tomando entonces la palabra,° Él les dijo: ¿Veis todas estas cosas? De cierto os digo: De ningún modo quedará aquí piedra sobre piedra que no sea° totalmente derribada.° Señales antes del fin3. Y estando sentado en el monte de los Olivos, se le acercaron los discípulos en privado, diciendo: Dinos, ¿cuándo será esto, y cuál° la señal de tu venida,° y de la consumación de la era? 4. Jesús respondió y les dijo: Mirad que nadie os engañe. 5. Porque vendrán muchos en mi nombre diciendo: Yo soy el Mesías,° y a muchos engañarán. 6. Y estaréis destinados° a oír guerras y alarma de guerras. Mirad, no os alarméis, porque así debe acontecer; pero aún no es el fin. 7. Porque será levantada nación contra nación y reino contra reino, y habrá° hambres y terremotos en diferentes lugares. 8. Y todas estas cosas serán el principio de los dolores de parto. 9. Entonces os entregarán a tribulación y os matarán, y seréis aborrecidos por todas las naciones a causa de mi nombre.° 10. Y muchos tropezarán entonces, y se entregarán unos a otros, y unos a otros se aborrecerán. 11. Y serán levantados muchos falsos profetas y engañarán a muchos. 12. Y por haberse multiplicado la maldad, el amor de la mayoría se enfriará. 13. Mas el que perseveró hasta el fin, éste será salvo.° 14. Y este evangelio del reino será proclamado en toda la tierra habitada, para testimonio a las naciones, y entonces vendrá el fin. 15. Por tanto, cuando veáis la abominación de la desolación, dicha por el profeta Daniel, puesta en el lugar santo (el que esté leyendo,° entienda), 16. entonces, los que estén en Judea, huyan a los montes; 17. el de la azotea, no baje a tomar lo de su casa; 18. y el que esté en el campo,° no regrese a tomar su capa.° 19. Mas, ¡ay de las que estén encintas, y de las que estén amamantando en aquellos días! 20. Orad, por tanto, para que vuestra huida no sea en invierno, ni en sábado.° 21. Porque habrá entonces una gran tribulación,° cual no la ha habido desde el comienzo del mundo hasta ahora, ni la habrá jamás. 22. Y si aquellos días no hubieran sido acortados, ninguna carne sería salva; pero por causa de los escogidos, aquellos días serán acortados. 23. Entonces, si alguno os dice: ¡He aquí el Mesías! o: ¡Aquí!, no lo creáis. 24. Porque serán levantados falsos mesías, y falsos profetas, y mostrarán grandes señales y prodigios, hasta el punto de engañar, si fuera posible, aun a los escogidos. 25. He aquí os lo he predicho. 26. Si, pues, os dicen: ¡Mira, está en el desierto!, no salgáis. ¡Mira, está en las recámaras!, no lo creáis. 27. Porque como el relámpago sale de oriente y brilla hasta occidente, así será la venida° del Hijo del Hombre.° 28. Dondequiera que esté el cadáver, allí se juntarán los buitres.° La venida del Hijo del Hombre29. E inmediatamente después de la tribulación de aquellos días, el sol será oscurecido y la luna no dará su resplandor; las estrellas caerán del cielo° y las potencias de los cielos serán conmovidas: 30. Entonces aparecerá en el cielo la señal del Hijo del Hombre, y todas las tribus de la tierra se lamentarán entonces, y verán al Hijo del Hombre venir sobre las nubes del cielo° con poder y gran gloria. 31. Y enviará a sus ángeles con gran° trompeta, y reunirán a sus escogidos de los cuatro vientos, de un extremo al otro extremo de los cielos. 32. Así que, de la higuera aprended la parábola: Cuando su rama ya se pone tierna y brotan las hojas, sabéis que el verano está cerca. 33. Así también vosotros, cuando veáis todas estas cosas, conoced que está cerca, a las puertas. 34. De cierto os digo: De ningún modo pasará este linaje° hasta que sucedan todas estas cosas. 35. El cielo y la tierra pasarán, pero mis palabras no pasarán. 36. Pero acerca de aquél día y hora, nadie sabe, ni los ángeles de los cielos, ni el Hijo,° sino sólo el Padre. 37. Pero como en los días de Noé,° así será la venida° del Hijo del Hombre; 38. porque como en aquellos° días antes del diluvio, estaban comiendo y bebiendo, casándose y dándose en casamiento, hasta el día en que Noé entró en el arca, 39. y no se dieron cuenta° hasta que el diluvio llegó y se los llevó a todos,° así también será la venida° del Hijo del Hombre. 40. Entonces estarán dos en el campo: uno será tomado y el otro será dejado. 41. Dos mujeres° estarán moliendo en el molino: una será tomada y la otra será dejada. 42. ¡Velad, pues, porque no sabéis en cuál día viene vuestro Señor! 43. Pero sabed esto: Si el dueño de la casa hubiera sabido a qué hora de la noche vendría el ladrón, velaría y no permitiría que se horadara su casa. 44. Por esto, vosotros también estad preparados, porque el Hijo del Hombre viene a la hora que no pensáis.° 45. ¿Quién es pues el siervo fiel y prudente, al cual el señor puso sobre su servidumbre, para que les dé el alimento a tiempo? 46. ¡Bienaventurado el siervo aquel que, cuando llegue su señor, lo halle° haciendo así! 47. De cierto os digo que lo pondrá sobre todos sus bienes. 48. Pero si aquel siervo malo dice en su corazón: Mi señor tarda, 49. y comienza a golpear a sus consiervos y come y bebe con los que se emborrachan, 50. vendrá el señor de aquel siervo en día que no aguarda y a la hora que no conoce, 51. y lo castigará severamente,° y le señalará su parte con los hipócritas. Allí será el llanto y el crujido de los dientes. |