26.4 C
Miami
sábado, agosto 17, 2024
Más


    2 Corintios 5 - Version Moderna (1929)

    1. PORQUE sabemos que si nuestra casa terrestre, que es una frágil tienda, fuere deshecha, tenemos de Dios un edificio, casa no hecha de mano, eterna en los cielos.

    2. Y así en esta tienda gemimos, deseando ardientemente ser revestidos de nuestra morada que es del cielo:

    3. si en verdad fuéremos hallados vestidos en aquel día, y no desnudos.

    4. Porque nosotros que estamos en esta tienda, gemimos, estando agobiados, no que deseemos ser desnudados, sino revestidos, para que lo que en nosotros es mortal sea absorbido por la vida.

    5. Y el que nos ha hecho para esto mismo, es Dios, el cual nos ha dado las arras del Espíritu.

    6. Por lo cual estamos siempre confiados; y sabemos que mientras estamos presentes en el cuerpo, ausentes estamos del Señor

    7. (pues andamos por fe, y no por vista);

    8. estamos confiados, digo, y deseosos más bien de ausentarnos del cuerpo y estar presentes con el Señor.

    9. Por lo cual también nos esforzamos, para que, ora presentes en el cuerpo o ausentes de él, seamos aceptos al Señor:

    10. porque todos hemos de ser manifestados ante el tribunal de Cristo; para que cada uno reciba otra vez las cosas hechas en el cuerpo, según lo que haya hecho, sea bueno o malo.

    El ministerio de la reconciliación

    11. ¶Conociendo pues el temor que al Señor se le debe, persuadimos a los hombres; pero hemos sido manifestados a Dios, y espero que hemos sido manifestados también a vuestras conciencias.

    12. No nos recomendamos otra vez a vosotros, pero os damos ocasión de gloriaros por nuestra causa; para que tengáis con qué contestar a los que se glorían en la apariencia, y no en el corazón.

    13. Pues ora que estemos fuera de nosotros, es para Dios, ora que seamos cuerdos, es para vosotros.

    14. Porque el amor de Cristo nos apremia, juzgando nosotros así: Que uno solo murió por todos; luego en él todos murieron:

    15. y él murió por todos, para que los que viven, no vivan ya para sí mismos, sino para aquel que por ellos murió, y volvió a resucitar.

    16. Por tanto, nosotros de ahora en adelante, no conocemos a nadie según la carne: y aunque hayamos conocido a Cristo según la carne, ahora empero no le conocemos más así.

    17. Por tanto si alguno está en Cristo, es una nueva criatura: las cosas viejas pasaron ya, he aquí que todo se ha hecho nuevo.

    18. Y todas las cosas son de Dios, el cual nos ha reconciliado consigo mismo por medio de Cristo, y nos ha confiado a nosotros el ministerio de la reconciliación:

    19. es a saber, que Dios estaba en Cristo, reconciliando consigo mismo al mundo, no imputando a los hombres sus transgresiones; y a nosotros nos ha encomendado la palabra de la reconciliación.

    20. ¶Nosotros pues somos embajadores de parte de Cristo, como si Dios os rogara por medio de nosotros: ¡os rogamos, por parte de Cristo, que os reconciliéis con Dios!

    21. Pues a aquel que no conoció pecado, le hizo pecado, a causa de nosotros, para que nosotros fuésemos hechos justicia de Dios en él.