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sábado, agosto 17, 2024
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    Isaías 6 - Version Moderna (1929)

    Visión y llamamiento de Isaías

    1. EN el año que murió el rey Uzías, yo ví al Señor sentado sobre un trono alto y excelso; y las faldas de su ropa llenaban el Templo.

    2. Encima del trono estaban los serafines: seis alas tenía cada uno de ellos; con dos se cubrían el rostro, con dos se cubrían los pies, y con dos volaban.

    3. Y el uno clamaba al otro, diciendo: ¡Santo, santo, santo es Jehová de los Ejércitos, toda la tierra está llena de su gloria!

    4. Y los cimientos de los umbrales se conmovieron con la voz del que clamaba; y la Casa se llenó de humo.

    5. Entonces yo dije: ¡Ay de mí, pues soy perdido! porque soy hombre de labios inmundos, y en medio de un pueblo de labios inmundos habito; por cuanto mis ojos han visto al Rey, a Jehová de los Ejércitos.

    6. Y voló, a donde yo estaba, uno de los serafines, y traía en su mano un ascua encendida, que con las tenazas había tomado de sobre el altar;

    7. y con ella me tocó la boca, diciendo: ¡He aquí, ésta ha tocado a tus labios! ¡ya ha sido quitada tu iniquidad, y está perdonado tu pecado!

    8. ¶Oí también la voz del Señor que decía: ¿A quién enviaré? ¿y quién irá por nosotros? Y respondí: ¡Aquí estoy yo; envíame a mí!

    9. Dijo pues: Anda, y di a este pueblo: Oyendo oiréis, mas no entenderéis, y viendo veréis, mas no percibiréis.

    10. Embota el corazón de este pueblo, y haz que sean pesados sus oídos, y cierra sus ojos; para que no vea con sus ojos, ni oiga con sus oídos, y con su corazón no entienda, ni se convierta, ni sea sanado.

    11. Entonces yo dije: ¿Hasta cuándo, Señor? y respondió: Hasta que las ciudades queden desoladas, por falta de habitantes; y las casas, por no haber hombre en ellas; y la tierra venga a ser una desolación completa;

    12. y Jehová haya alejado los hombres; y los lugares abandonados sean muchos en medio de la tierra.

    13. Y si quedare aún en ella la décima parte, ésta volverá a ser destruída. Mas como el roble y la encina, que el ser cortados, aun queda vitalidad en ellos, así la santa semilla será la vitalidad de ella.