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sábado, agosto 17, 2024
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    Juan 9 - Version Moderna (1929)

    Jesús sana a un ciego de nacimiento

    1. Y PASANDO adelante, vió a un hombre que era ciego desde su nacimiento.

    2. Y le preguntaron sus discípulos, diciendo: Rabbí ¿quién pecó, éste o sus padres, para haber nacido ciego?

    3. Jesús les respondió: Ni pecó éste, ni sus padres; mas fué para que las obras de Dios fuesen manifestadas en él.

    4. Es menester que yo haga las obras de aquel que me envió, mientras es de día: la noche viene cuando nadie puede trabajar.

    5. Mientras estoy en el mundo, la luz soy del mundo.

    6. Habiendo dicho esto, escupió en tierra, e hizo lodo de la saliva, y con el lodo untó los ojos del ciego,

    7. y le dijo: Vé, lávate en el estanque de Siloé (que interpretado, quiere decir: Enviado). Se fué, pues, y lavóse, y volvió viendo.

    8. Por tanto los vecinos y los que antes le habían visto que era ciego, dijeron: ¿No es éste aquel que se sentaba y mendigaba?

    9. Unos dijeron: Éste es; otros dijeron: No, sino que se le parece. Él empero dijo: Yo soy.

    10. Dijéronle entonces: ¿Pues cómo te fueron abiertos los ojos?

    11. Respondió él y dijo: Aquel hombre llamado Jesús hizo lodo, y lo untó sobre mis ojos, y me dijo: Anda al estanque de Siloé, y lávate; y fuí, y me lavé, y recibí la vista.

    12. Ellos por tanto le dijeron: ¿Dónde está él? Díceles: No sé.

    Los fariseos interrogan al ciego sanado

    13. ¶Traen a los fariseos al que antes había sido ciego.

    14. Y era el sábado cuando Jesús hizo el lodo, y le abrió los ojos.

    15. Otra vez, pues, los fariseos le preguntaron cómo había recibido la vista. Y él les dijo: Puso lodo sobre mis ojos, y me lavé, y veo.

    16. Por tanto algunos de los fariseos dijeron: Este hombre no es de Dios, porque no guarda el sábado. Otros empero dijeron: ¿Cómo puede un hombre pecador hacer tales milagros? Y había disensión entre ellos.

    17. Dicen otra vez al ciego: ¿Tú qué dices de él, ya que te abrió los ojos? Y dijo: Que es profeta.

    18. Mas los judíos no creyeron respecto de él, que había sido ciego, y había recibido la vista, hasta que llamaron a los padres del que había recibido la vista,

    19. y les preguntaron, diciendo: ¿Es éste vuestro hijo, de quien decís que nació ciego? ¿cómo, pues ve ahora?

    20. Sus padres respondieron y dijeron: Sabemos que éste es nuestro hijo, y que nació ciego;

    21. pero cómo ahora ve, no lo sabemos; o quién le abrió los ojos, no lo sabemos; preguntadle a él; edad tiene; él dará razón de sí mismo.

    22. Esto lo dijeron sus padres, porque temían a los judíos; porque los judíos habían ya convenido, que si alguno confesara que él era el Cristo, fuese echado de la sinagoga.

    23. Por esto dijeron sus padres: Edad tiene; preguntadle a él.

    24. ¶Llamaron,pues, segunda vez, al hombre que había sido ciego, y le dijeron: Da gloria a Dios; nosotros sabemos que este hombre es pecador.

    25. El por tanto respondió: Si es pecador, no lo sé; una cosa sé, que habiendo yo sido ciego, ahora veo.

    26. Entonces le dijeron otra vez: ¿Qué te hizo? ¿cómo te abrió los ojos?

    27. Les respondió: Os dije ya, y no escuchasteis; ¿por qué queréis oírlo otra vez? ¿queréis vosotros también haceros sus discípulos?

    28. Entonces le vilipendiaron, y dijeron: Tú eres su discípulo; mas nosotros somos discípulos de Moisés.

    29. Sabemos que Dios habló a Moisés; pero en cuanto a éste, no sabemos de dónde sea.

    30. Respondió el hombre y les dijo: Pues esto es lo maravilloso, que no sabéis de dónde sea; y él me ha abierto los ojos.

    31. Sabemos que Dios no oye a los pecadores; mas si alguno teme a Dios y hace su voluntad, a éste oye.

    32. Desde el principio del mundo, no se oyó jamás que nadie abriera los ojos a uno que nació ciego.

    33. Si éste no fuera de Dios, no podría hacer nada.

    34. Ellos respondieron y le dijeron: ¡Tú naciste enteramente en pecados! ¿y tú nos enseñas a nosotros? y le echaron fuera.

    Ceguera espiritual

    35. ¶Jesús oyó decir que le habían echado fuera, y hallándole, le dijo: ¿Crées tú en el Hijo de Dios?

    36. Respondió él, diciendo: ¿Quién es Señor, para que yo crea en él?

    37. Jesús le dijo: Tú le has visto, y el que habla contigo él mismo es.

    38. Y le dijo: ¡Creo, Señor! Y le adoró.

    39. Y dijo Jesús: Para juicio vine a este mundo, a fin de que los que no ven, vean, y los que ven, queden ciegos.

    40. Aquellos de los fariseos que estaban con él oyeron esto, y le dijeron: ¿Acaso nosotros también somos ciegos?

    41. Díjoles Jesús: Si fuerais ciegos no tendríais pecado: ahora empero decís: Nosotros vemos; por tanto, vuestro pecado permanece.