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jueves, julio 18, 2024
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    Ezequiel 37 - Biblia Septuaginta al Español

    El valle de los huesos secos

    1. Y fue hecha sobre mí la mano del Señor, y sacóme en espíritu el Señor, y me puso en medio del campo; y éste estaba lleno de huesos humanos;

    2. y condújome por entre ellos de contorno en contorno; y he aquí muchos sobremanera sobre el haz de la llanura, secos sobremanera.

    3. Y me dijo: «Hijo de hombre ¿si vivirán estos huesos?» Y dije: «Señor; tú sabes esto.»

    4. Y díjome: «Profetiza sobre estos huesos y les dirás: «Los huesos, los secos, oíd palabra del Señor»:

    5. «Esto dice el Señor a estos huesos: «He aquí yo traigo sobre vosotros espíritu de vida;

    6. y daré sobre vosotros nervios y subiré sobre vosotros carnes; y extenderé sobre vosotros piel, y daré mi espíritu sobre vosotros y viviréis; y conoceréis que yo soy el Señor.»

    7. Y profeticé, según me mandó. Y aconteció, mientras yo profetizaba, y he aquí un temblor, y acercáronse los huesos, entre sí a su juntura.

    8. Y vi, y he aquí sobre ellos nervios y carnes nacían; y subían entre ellos pieles encima; y espíritu no había en ellos.

    9. Y díjome: «Profetiza sobre el espíritu, profetiza, hijo de hombre, y di al espíritu: «Esto dice el Señor: «De los cuatro vientos ven y sopla sobre estos muertos, y vivan.»

    10. Y profeticé según que me mandó; y entró en ellos el espíritu, y vivieron y pusiéronse sobre sus pies, congregación mucha sobremanera.

    11. Y hablóme el Señor, diciendo: Hijo de hombre, estos huesos, toda la casa de Israel es; y ellos dicen: «Secos se han tornado nuestros huesos, ha perecido nuestra esperanza, hemos discordado(a) ».

    12. Por esto profetiza y di: «Esto dice el Señor: «He aquí yo abro vuestras tumbas; y os sacaré de vuestras tumbas; y os introduciré en la tierra de Israel;

    13. y conoceréis que yo soy el Señor, cuando yo abriere vuestras tumbas, para sacar yo de las tumbas a mi pueblo

    14. y daré mi espíritu en vosotros y viviréis; y os pondré sobre vuestra tierra; y conoceréis que yo, el Señor, he hablado, y así lo haré», dice el Señor.

    La reunión de Judá e Israel

    15. Y fue hecha palabra de Señor a mí, diciendo:

    16. «Hijo de hombre, tómate vara y escribe sobre ella: a Judá y los hijos de Israel los añadidos a él; y vara segunda te tomarás, y la escribirás: «Para José, vara de Efraín y todos los hijos de Israel los añadidos a él.»

    17. Y las juntarás entre sí, para ti, en vara una, para atarlas; y estarán en tu mano.

    18. Y será: cuando te dijeren los hijos de tu pueblo: «¿No nos indicas qué es esto para ti?»

    19. Y les dirás: Esto dice el Señor: «He aquí yo tomaré la tribu de José, la en mano de Efraín, y las tribus de Israel las unidas con él, los daré sobre la tribu de Judá y serán en vara una para la mano de Judá.

    20. Y serán las varas sobre las que tú has escrito, sobre ellas, en tu mano, a faz de ellos»;

    21. y les dirás: «Esto dice el Señor Señor: «He aquí yo tomo toda la casa de Israel de en medio de las gentes, donde han entrado, allí, y los congregaré de todos los en contorno de ellos; y los introduciré en la tierra de Israel;

    22. y los daré en gente, en la tierra mía, y en los montes de Israel; y príncipe uno será de ellos, y no serán ya en dos gentes; y no se separarán, no, ya en dos reinos;

    23. para que no se manchen ya en sus ídolos. Y los libraré de todas sus iniquidades en que pecaron en ellas; y los purificaré, y me serán mi pueblo; y yo el Señor les seré su Dios;

    24. y mi siervo David, príncipe en medio de ellos: será pastor uno de todos; pues en mis preceptos andarán, y mis juicios guardarán y los harán.

    25. Y habitarán sobre su tierra que yo he dado a mi siervo Jacob; donde habitaron, allí sus padres; y habitarán sobre ella, ellos. Y David, mi siervo, príncipe por el siglo;

    26. y pactaré con ellos pacto de paz; pacto sempiterno será con ellos; y pondré mi santuario en medio de ellos por el siglo;

    27. y estará mi tabernáculo en ellos; y seré, para ellos, su Dios; y ellos serán mi pueblo.

    28. Y conocerán las gentes que yo soy el Señor, el que los santifico; cuando estuviere mi santuario en medio de ellos por el siglo.»