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sábado, agosto 17, 2024
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    Hechos 22 - Biblia Septuaginta al Español

    1. «Varones hermanos, y padres, oídme la para vosotros, presente defensa».

    2. Y, oyendo que en hebrea lengua arengábales, más bien prestaron silencio. Y dijo:

    3. «Yo soy varón judío, nacido en Tarso de la Cilicia, y criado en esta ciudad; a los pies de Gamaliel instruido con exactitud en la paterna ley, celador siendo de Dios, así como todos vosotros sois hoy;

    4. quien este camino perseguí a muerte, atando y entregando en custodias, y a varones y mujeres;

    5. como también el sumo sacerdote testificábame y toda la ancianidad; de los que asimismo epístolas recibiendo para los hermanos en Damasco, partía, habiendo de traer también los que allí hubiese atados a Jerusalén, para ser castigados.

    Pablo relata su conversión

    6. Y acontecióme yendo y acercándome a Damasco, alrededor del mediodía, súbitamente del cielo relampaguear luz bastante en torno de mí;

    7. y caí al suelo y oí una voz, diciéndome: «Saúl, Saúl, ¿qué me persigues?»

    8. Y yo respondí: «¿Quién eres, Señor?» Y dijo a mí: «Yo soy Jesús, el Nazareno, a quien tú persigues».

    9. Y los que conmigo estaban, la luz ciertamente vieron; la voz, empero, no oyeron del que me hablaba.

    10. Y dije: «¿Qué haré, Señor?» Y el Señor dijo a mí: «Levantándote, ve a Damasco; y allí se te hablará de todo lo que determinado te está hacer».

    11. Y, como nada veía por la gloria de aquella luz, manuguiado de los que conmigo estaban, vine a Damasco.

    12. Y Ananías, un varón timorato según la ley, testimoniado de todos los habitantes judíos.

    13. viniendo a mí y parado a par, díjome: «Saúl hermano, mira acá». Y yo a la misma hora miré allá: a él.

    14. Y él dijo: «El Dios de nuestros padres ha predeterminado que conozcas su voluntad, y veas al justo(a) y oigas voz de su boca;

    15. porque testigo de él a todos los hombres serás de lo que has visto y oído.

    16. Y ahora ¿qué tardas? Levantándote, bautízate y lávate de tus pecados, invocando el nombre de él».

    Pablo es enviado a los gentiles

    17. Y acontecióme retornando a Jerusalén y orando en el santuario estar en éxtasis,

    18. y verle diciéndome: «Apresúrate y sal en breve de Jerusalén, por esto: porque no recibirán tu testimonio acerca de mí».

    19. Y yo dije: «Señor, ellos saben que yo estaba encarcelando y flagelando, por las sinagogas, a los creyentes en Ti;

    20. y, cuando se derramaba la sangre de Esteban, testigo tuyo, también yo estaba allí parado, y consintiendo y guardando las vestiduras de los que le arrebataban».

    21. Y dijo a mí: «Anda, que yo a gentes lejos he de enviarte».

    Pablo en manos del tribuno

    22. Y escucháronle hasta esta palabra; y alzaron su voz diciendo: «¡Quita de la tierra al tal! ¡pues no debe él vivir!»

    23. Y, vociferando ellos, y lanzando sus vestiduras, y polvareda arrojando al aire,

    24. mandó el tribuno se le introdujese en el campamento, diciendo que con azotes se le interrogase, para conocer por qué causa así voceábanle.

    25. Y, como le estiraron con correas, dijo al que allí estaba centurión, Pablo: «¿Si a hombre romano y no condenado lícito os es azotar?»

    26. Y, oyendo el centurión, acercándose al tribuno, anuncióselo, diciendo: «¿Qué vas a hacer? Que este hombre romano es».

    27. Y, acercándose al tribuno, díjole: «¿Dime si romano eres?» Y él dijo: «Sí».

    28. Y respondió el tribuno: «Yo, por mucha suma la ciudadanía esta he adquirido». Y Pablo dijo: «Yo, empero, hasta he nacido(b) ».

    29. Luego, pues, retiráronse de él los que le iban a interrogar. Y el tribuno temió, conociendo que romano es y que le ha atado.

    Pablo ante el concilio

    30. Y al siguiente día, queriendo conocer lo cierto: el por qué es acusado por los judíos, soltóle y mandó juntarse los sumos sacerdotes y todo el sanedrín, y descendiendo a Pablo, puso ante ellos.