Job 42 - Reina Valera 1990 (Adventista)

Confesión y justificación de Job

1. Entonces Job respondió al Eterno:

2. "Reconozco que todo lo puedes, y que ningún plan tuyo puede ser frustrado.

3. "Tú preguntaste: '¿Quién es ese que oscurece el consejo sin ciencia?' Es verdad, yo hablé de lo que no entendía, cosas tan maravillosas, que no las puedo comprender.

4. "Tú dijiste: 'Yo te preguntaré, y tú me responderás'.

5. "De oídas te había conocido. Pero ahora mis ojos te ven.

6. "Por eso me aborrezco y me arrepiento, en polvo y en ceniza".

7. Después de hablar estas palabras a Job, el Eterno dijo a Elifaz temanita: "Mi enojo se encendió contra ti y tus dos amigos; porque no habéis hablado por mí lo recto, como mi siervo Job.

8. "Ahora, pues, tomad siete becerros y siete carneros, id a mi siervo Job, y ofreced holocausto por vosotros. Mi siervo Job orará por vosotros, porque a él atenderé para no trataros según vuestra insensatez. Porque no habéis hablado por mí lo recto, como mi siervo Job".

9. Fueron, pues, Elifaz temanita, Bildad suhita y Zofar naamatita, e hicieron como el Eterno les dijo. Y el Señor aceptó la oración de Job.

Restauración de la prosperidad de Job

10. Y cuando Job hubo orado por sus amigos, el Eterno quitó su aflicción. Después duplicó todo lo que había sido de Job.

11. Vinieron a él todos sus hermanos y hermanas, y los que antes lo habían conocido, y comieron con él en su casa. Se condolieron de él, y lo consolaron de todo aquel mal que el Eterno había traído sobre él. Y cada uno le dio una moneda de plata y un anillo de oro.

12. Y el Eterno bendijo el postrer estado de Job más que su principio. Llegó a tener ovejas 14.000, camellos 6.000, yuntas de bueyes 1.000, y 1.000 asnas.

13. Y tuvo otros siete hijos y tres hijas.

14. Llamó a la primera Jemima (paloma), a la segunda Cesia (canela), y a la tercera Keren Apuc (pomo de cosmético).

15. Y en toda la tierra, no se hallaron mujeres tan hermosas como las hijas de Job. Y su padre les dio herencia entre sus hermanos.

16. "Después de esto, Job vivió 140 años, y vio a sus hijos, y a los hijos de ellos, hasta la cuarta generación.

17. Y Job murió anciano y colmado de días.