31 C
Miami
sábado, agosto 17, 2024
Más


    Salmos 139 - Reina Valera 1990 (Adventista)

    Omnipresencia y omnisciencia de Dios Al músico principal. Salmo de David.

    1. Salmo de David Oh Eterno, tú me has examinado y me conoces.*

    2. Tú conoces mi sentarme y mi levantarme; desde lejos entiendes mis pensamientos.*

    3. Tú conoces mi senda, y mi acostarme. Conoces todos mis caminos.

    4. Aún no está la palabra en mi lengua,* y tú, oh Eterno, la sabes toda.

    5. Detrás y delante me rodeas, y sobre mí pones tu mano.

    6. Tal conocimiento es demasiado maravilloso para mí, demasiado alto para alcanzarlo.

    7. ¿Adónde me iré de tu Espíritu? ¿Y adónde huiré de tu presencia?*

    8. Si subiera a los cielos, allí estás tú;* si en el abismo hiciera mi lecho, allí estás también.*

    9. Si tomara las alas del alba, y habitara en el extremo del mar,

    10. aun allí me guiará tu mano, y me sostendrá tu diestra.

    11. Si dijera: "De seguro las tinieblas me encubrirán", hasta la noche resplandecerá sobre mí.

    12. Ni aun las tinieblas me encubren de ti,* y la noche es tan luminosa como el día; lo mismo te son las tinieblas que la luz.

    13. Porque tú formaste mis entrañas, me cubriste desde antes de nacer.*

    14. Te alabo, porque de modo formidable y maravilloso fui hecho. Maravillosas son tus obras. Lo sé muy bien.*

    15. No fueron encubiertos de ti mis huesos, aun cuando en oculto fui formado, y tejido en lo más profundo de la tierra.

    16. Tus ojos velan mi embrión, todo eso estaba escrito en tu libro, habías señalado los días de mi vida, cuando aún no existía ninguno de ellos.

    17. ¡Cuán preciosos me son, oh Dios, tus pensamientos! ¡Cuán grande es la suma de ellos!

    18. Si los contara, serían más que la arena. Si llegara al fin, aún estaría contigo.

    19. ¡Oh, si quitaras la vida al impío, y alejaras de mí a los hombres sanguinarios!

    20. Porque blasfeman contra ti, tus enemigos se rebelan en vano.*

    21. Oh Eterno, ¿no odio a los que te aborrecen, y detesto a los que se levantan contra ti?

    22. Los aborrezco por completo, los considero enemigos.

    23. Examíname, oh Dios, y conoce mi corazón; pruébame, y reconoce mis pensamientos.*

    24. Mira si voy en mal camino, y guíame por el camino eterno.