Jesus después de haber resucitado justo antes de irse y ser recibido arriba en el cielo, él estuvo 40 días en la tierra apareciéndose solo a los que lo habían conocido. De manera increíble Jesus continuaba hablándoles y ensenándoles a cerca del reino. Pero antes de irse les dio instrucciones precisas y les recordó la promesa de Dios Padre de que antes había hablado.
“Y estando juntos, les mandó que no se fueran de Jerusalén, sino que esperasen la promesa del Padre, la cual, les dijo, oísteis de mí. Porque Juan ciertamente bautizó con agua, mas vosotros seréis bautizados con el Espíritu Santo dentro de no muchos días”. Hechos 1:4-5
Seréis bautizados (La promesa):
Jesus les estaba recordando algo que ya les había dicho cuando hablo en Lucas 24:29 y otras ocasiones. Jesus le llamo “la promesa de mi Padre”.
”He aquí, yo enviaré la promesa de mi Padre sobre vosotros; pero quedaos vosotros en la ciudad de Jerusalén, hasta que seáis investidos de poder desde lo alto”. Lucas 24:49
Sin duda Jesus tenía algo especial preparado para sus seguidores, aquí Jesus por algún motivo no quería que se dispersaran y les pide que se queden juntos en Jerusalén. Y les dice: “para que reciban la promesa de mi Padre”. Y continúa explicándoles:
“Recibiréis poder, cuando haya venido sobre vosotros el Espíritu Santo, y me seréis testigos en Jerusalén, en toda Judea, en Samaria, y hasta lo último de la tierra”. Hechos 1:8
Imagínate que tú estas en ese grupo selecto, ese grupo muy especial, y Jesus te da esas órdenes antes de irse. Hasta este momento tú tienes poca información, lo único que sabes es que viene la promesa de parte de Dios Padre, de la que Jesus ha estado hablando por mucho tiempo. Solo sabes pocas cosas respecto a la promesa, y dices:
a) Seremos investidos de poder desde lo alto (Lucas 24:49)
b) Seremos bautizados con el Espíritu Santo así como Juan bautizo en agua (Hechos 1:5)
c) Recibiremos poder cuando venga el Espíritu Santo sobre nosotros (Hechos 1:8)
Jesus les había dicho que esto sucedería dentro de no muchos días, ahora sabemos que fueron 10 días después de que fue recibido en el cielo. Esto lo sabemos porque ahora lo podemos leer en el libro de Hechos capitulo 1, que esto sucedió en un día festivo de pentecostés. Esto lo sabemos porque a los cincuenta días después de la pascua se celebra la fiesta de Pentecostés, que quiere decir 50 días después de la pascua. Si, Jesus anduvo 40 días después de la pascua, entonces esto sucedió 10 días después de que Jesus ascendió al cielo.
Como lo podemos leer en Hechos capitulo 2 la promesa del Padre llego en un día de fiesta o dia festivo llamado fiesta de Pentecostés. Por su puesto no es una casualidad que esto haya sucedido en este día de fiesta. Dios todo lo hace con un propósito y en ese día había gente reunida de muchas partes del mundo en Jerusalén. Veamos esta narración tan interesante de la Promesa del Padre:
1 Cuando llegó el día de Pentecostés, estaban todos unánimes juntos. 2 Y de repente vino del cielo un estruendo como de un viento recio que soplaba, el cual llenó toda la casa donde estaban sentados; 3 y se les aparecieron lenguas repartidas, como de fuego, asentándose sobre cada uno de ellos. 4 Y fueron todos llenos del Espíritu Santo, y comenzaron a hablar en otras lenguas, según el Espíritu les daba que hablasen. Hechos 2:1-4
Este día debió haber sido maravilloso, Jesus lo compara como ser bautizados (sumergidos) con el bautismo de Juan en agua, pero esta experiencia era ser bautizados con el Espíritu Santo (Sumergidos en el Espíritu Santo). Si hacemos una recopilación de los términos que se han utilizado para este evento llamado la promesa de Dios Padre, seria asi:
a) Ser investidos de poder desde lo alto (Lucas 24:49)
b) Ser bautizados con el Espíritu Santo así como Juan bautizo en agua (Hechos 1:5)
c) Recibir poder cuando venga el Espíritu Santo sobre nosotros (Hechos 1:8)
d) Ser llenos del Espíritu Santo (Hechos 2:4)
Estas experiencias fueron en las personas, esto sin contar las manifestaciones externas que menciona Hechos como:
a) Estruendo
b) Viento recio que soplaba
c) Llenó la casa
d) Lenguas repartidas como de fuego en las personas
Seréis bautizados (El suceso):
Ahora bien si continuamos con la narración, es importante notar que Pedro se levanta con un entendimiento nuevo de las cosas y sobre todo con determinación, acababa de ser sumergido con el Espíritu Santo. En ese momento se estaba cumpliendo lo que Jesus les había dicho “y me seréis testigos”. Pedro mismo dijo: “A este Jesús resucitó Dios, de lo cual todos nosotros somos testigos”. Hechos 2:32
Pedro cuando se levanto inmediatamente recordó las palabras del profeta Joel, recuerda es el Espíritu Santo obrando de una manera maravillosa en la vida de Pedro:
“Mas esto es lo dicho por el profeta Joel: 17 Y en los postreros días, dice Dios, Derramaré de mi Espíritu sobre toda carne, Y vuestros hijos y vuestras hijas profetizarán; Vuestros jóvenes verán visiones, Y vuestros ancianos soñarán sueños; 18 Y de cierto sobre mis siervos y sobre mis siervas en aquellos días Derramaré de mi Espíritu, y profetizarán. 19 Y daré prodigios arriba en el cielo, Y señales abajo en la tierra, Sangre y fuego y vapor de humo; 20 El sol se convertirá en tinieblas, Y la luna en sangre, Antes que venga el día del Señor, Grande y manifiesto; 21 Y todo aquel que invocare el nombre del Señor, será salvo.” Hechos 2:16-21
Agrega por favor otro término a la lista, ahora Pedro describe esta experiencia como un “derramar” del Espíritu sobre los que creían, entonces describe lo que vendría como experiencia a los que participaban de recibir la promesa del Padre, pero solo los que habían recibido la promesa estaban participando de estas manifestaciones.
a) Los hijos y las hijas profetizaran
b) Los jóvenes verán visiones
c) Los ancianos sonaran sueños
d) Derramare mi Espíritu sobre mis siervos y mis siervas y profetizaran
e) Prodigios en el cielo
f) Señales en la tierra
g) Salvación
¡No puedo dejar de mencionar esto! Normalmente antes de una tragedia grande viene una oportunidad grande de parte de Dios, esto es la primera vez que lo voy a decir. Dios antes de hacer algo grande, manda también de su misericordia a la tierra en grande. Lo puedes ver en la historia de Jonás, en el libro de Joel y en esta ocasión. Esta misma narración sucedió antes de la destrucción del templo, durante la destrucción masiva o devastación de Jerusalén en el año 70 DC. No podemos ignorar lo que menciona Joel:
19 Y daré prodigios arriba en el cielo, Y señales abajo en la tierra, Sangre y fuego y vapor de humo; 20 El sol se convertirá en tinieblas, Y la luna en sangre, Antes que venga el día del Señor, Grande y manifiesto; 21 Y todo aquel que invocare el nombre del Señor, será salvo.” Hechos 2:16-21
Estamos en la época del Espíritu Santo, es decir Jesus nos dijo que era necesario que él se fuera y entonces él iba a enviar al Espíritu Santo. Esta historia se va a repetir una vez mas pero en una dimensión más grande. Así como sucedió en aquel día de pentecostés y hubo un gran derramamiento del Espíritu Santo antes de una grande destrucción llamada el día de Señor en Jerusalén en el año 70 DC. Esto también sucederá en Gran escala y será Grande y manifiesto como lo indica Joel.
Como Jesus bien lo mencionó, no nos toca a nosotros saber los tiempos y las sazones. Más bien nos toca obedecer y hacer la voluntad de Dios.
Seréis bautizados (El resultado):
Cuando las personas que estaban de fiesta en Jerusalén vieron lo que estaba sucediendo y comenzaron a creer por el testimonio de los discípulos de Jesus, vino una respuesta por parte de la gente:
”Al oír esto, se compungieron (dolieron, entristecieron) de corazón, y dijeron a Pedro y a los otros apóstoles: Varones hermanos, ¿qué haremos?” Hechos 2:37
La siguiente es una declaración fabulosa de parte de Pedro, recuerda que Pedro recibió un entendimiento mayor con el bautismo o investidura del Espíritu Santo. Al momento también recibió una manera de hablar distinta con poder y gran denuedo. Ahora Pedro hablaba con autoridad y con mucho poder de convicción (¡muy diferente a la vez que lo negó tres veces!):
“Pedro les dijo: Arrepentíos, y bautícese cada uno de vosotros en el nombre de Jesucristo para perdón de los pecados; y recibiréis el don del Espíritu Santo. Porque para vosotros es la promesa, y para vuestros hijos, y para todos los que están lejos; para cuantos el Señor nuestro Dios llamare”. Hechos 2:38-39
Don quiere decir regalo, el Espíritu Santo de Dios es un regalo disponible para sus hijos y para los hijos de sus hijos y para todos aquellos que el Señor llamare. “Porque para vosotros es la promesa, y para vuestros hijos, y para todos los que están lejos; para cuantos el Señor nuestro Dios llamare”.
Pedro resume los requisitos:
a) Arrepentíos (Cambiar de forma de vivir, rechazando el pecado).
b) Bautícese en agua en el nombre de Jesus para perdón de pecados
Y entonces podrán recibir el don del Espíritu Santo de parte del Padre, por medio de Jesus, Pedro lo explica:
“Así que, exaltado por la diestra de Dios (Jesus), y habiendo recibido del Padre la promesa del Espíritu Santo (Jesus), ha derramado esto que vosotros veis y oís (Jesus)”. Hechos 2:33
¿Alguna vez te has preguntado que es el Bautismo del Espíritu Santo? ¿Qué es la Promesa del Padre?, de acuerdo a lo que hemos leído es:
a) Seremos investidos de poder desde lo alto (Lucas 24:49)
b) Seremos bautizados con el Espíritu Santo así como Juan bautizo en agua (Hechos 1:5)
c) Recibiremos poder cuando venga el Espíritu Santo sobre nosotros (Hechos 1:8)
d) Ser llenos del Espíritu Santo (Hechos 2:4)
e) Recibir el derramamiento del Espíritu Santo (Hechos 2:17, 2:33)
f)
Estarás de acuerdo conmigo que es muy difícil explicar algo espiritual, de acuerdo a mi limitado entendimiento podemos decir que recibir la investidura o bautismo del Espíritu Santo es:
Una experiencia con el Espíritu de Dios, donde eres sumergido, zabullido o llenado de su Espíritu en sobremanera, eres revestido, investido o vestido de poder (promovido/nombrado), eres capacitado por el Espíritu Santo con nuevas habilidades, recibes una gracia y habilidad de hablar en público (¡eso es ser testigo!). Este don está disponible para todos los que Dios llamare y le pidan de su Santo Espíritu. “Es decir todos los hijos de Dios que tienen un propósito (Que somos todos) , esto es, TODOS los hijos de Dios y nuestros hijos”.
Tú recordaras que Jesus les pedía que no se fueran de Jerusalén, y ellos obedecieron estando en una búsqueda constante del don de Dios en oración y estando de acuerdo (unánimes):
“Todos éstos perseveraban unánimes en oración y ruego, con las mujeres, y con María la madre de Jesús, y con sus hermanos”. Hechos 1:14
“Cuando llegó el día de Pentecostés, estaban todos unánimes juntos”. Hechos 2:1
¡Qué poder de unidad de la iglesia! ¿Hará falta esto en nuestros días?… Pasado un tiempo después de la conversión de Pablo, vino este suceso:
1 Aconteció que entre tanto que Apolos estaba en Corinto, Pablo, después de recorrer las regiones superiores, vino a Efeso, y hallando a ciertos discípulos, 2 les dijo: ¿Recibisteis el Espíritu Santo cuando creísteis? Y ellos le dijeron: Ni siquiera hemos oído si hay Espíritu Santo. Hechos 19:1-2
Pablo ahora les habla a ciertos discípulos y les pregunta si recibieron al Espíritu Santo, a lo cual ellos respondieron que nos sabían que había Espíritu Santo. Ellos ya conocían a Jesus y fueron bautizados en el bautismo de Juan (Recuerda que Juan predicaba arrepentimiento de pecados). A lo cual Pablo les pregunta:
“Entonces dijo: ¿En qué, pues, fuisteis bautizados? Ellos dijeron: En el bautismo de Juan”. Hechos 19:3
Sin duda Pablo les estaba preguntando por el Bautismo del Espíritu Santo, recuerda nunca dijeron ¿quién es Jesus? puesto que ya lo conocían, ellos preguntaron por el Espíritu Santo. Acto seguido:
Cuando oyeron esto, fueron bautizados en el nombre del Señor Jesús. Y habiéndoles impuesto Pablo las manos, vino sobre ellos el Espíritu Santo; y hablaban en lenguas, y profetizaban. Hechos 19:5-6
¿Te fijas el orden de los sucesos? En otras palabras ellos cumplieron con los requisitos:
a) Arrepentíos (Cambiar de forma de vivir, rechazando el pecado). (Bautismo de Juan)
b) Bautícese en agua en el nombre de Jesus para perdón de pecados (Bautismo de Jesus)
El bautismo del Espíritu Santo está disponible para los siervos y siervas de Jesus, hijos, hijas, hijos de sus hijos e hijas. ¡Todo el que quiera servir a Jesus! En otras palabras para todos los que crean, se arrepientan y sean bautizados en agua para perdón de pecados.
La manifestación, la experiencia, la forma y modo dependen de Dios, aun el orden de los sucesos dependen de Dios. Recuerda bien que dice que ellos hablaban en lenguas o idiomas “según el Espíritu les daba que hablasen”. Esto es muy importante de entender, el Espíritu Santo de Dios tiene voluntad, emociones y sentimientos, el es una persona con voluntad propia. Por lo tanto es importante entender que las manifestaciones, formas y circunstancias son de parte de Dios.
A nosotros solo nos toca arrepentirnos, bautizarnos en agua en el nombre de Jesus para perdón de pecados, obedecer, creer, confiar, tener fe, pedir el Espíritu Santo, desearlo como algo muy valioso, y estar listos para recibirlo. Recuerda la promesa del Padre: “Serás investido de poder desde lo alto”
Empieza hoy a pedir es hermoso regalo que Dios prometió, empieza a buscarlo con oración y ayuno. Pide le a Jesus que derrame de su Espíritu Santo sobre tu vida. Búscale de todo tu corazón y cuando menos lo pienses: “Serás investido de poder desde lo alto”
Si eres siervo de Dios o sierva o hijo o hija que le sirves o le quieres servir aun más, necesitas al Espíritu Santo. Necesitas ser revestido de poder desde lo alto, necesitas un derramamiento de poder en tu vida. Necesitas de la grandiosa ayuda y dirección del Espíritu. Los grandes cambios a tu vida vienen cuando conoces Espíritu Santo y lo dejas dirigir tu vida. ¡Comienza hoy a buscarle! ¡Serás revestido de poder! ¡Serás investido de poder!
¡Bendiciones de lo alto!
Leer La promesa del Padre: “Serás investido de poder desde lo alto” en Blog Cristiano de Abdiel Salas
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