Las Crónicas De La Fe – El Ciclo De Vida De La Fe: “Cómo trabaja la fe” † Blogs Cristianos

El Ciclo de Vida de la Fe

“Cómo Trabaja la fe”

Introducción: Otra de las cosas importantes que debemos entender para activar y utilizar correctamente la fe, es conocer cómo trabaja la fe. Cuando un creyente entiende verdaderamente, los diferentes pasos que sigue la fe, está facultado para activarla y recibir las cosas que la Biblia promete. Es a través de entender cómo trabaja que aprendemos que necesitamos apropiarnos de ella.

La fe es un proceso

Si vemos a Romanos 1:17, una de las primeras cosas que notamos acerca de la fe, es que es un proceso. A medida que vemos las Escrituras vemos que la fe empieza en un punto de infancia, crece a un punto de adolescencia y luego llega a un punto de madurez, es el ciclo de vida que tiene que atravesar todo aquel que desea tener fe. La fe tiene básicamente tres estados de crecimiento llamados “el ciclo de vida de la fe”.

1. El nivel de infancia – La fe viene – Este es el primer estado de la fe. Se caracteriza porque la persona está empezando el proceso de la fe. Para ser capaz de creer en Dios para todo, usted tiene que “venir a la fe”. Este es el proceso donde hace todo lo necesario para tener fe, porque una vez que usted tenga fe para algo, estará en camino de recibir. La razón del por qué muchas personas fallan, es porque no han desarrollado la fe necesaria para recibir las cosas por las que están creyendo.

Ejemplos de la necesidad de crecimiento que tiene la fe – La fe puede ser relacionada con un músculo. No podemos levantar un peso grande, si no empezamos a ejercitar nuestros músculos. Eso también ocurre en el proceso de la fe. Para creer en Dios, primero usted tiene que tener la fe necesaria. Algo que le ayudará a entender el proceso, es haciendo una comparación con el dinero. El dinero es una manera de intercambiar lo que tenemos, para conseguir las cosas que deseamos. Cuando estamos en una tienda damos nuestro dinero a cambio de materiales, alimento, etc. Si no tenemos suficientes fondos para comprar algo, entonces no podemos recibir las cosas que deseamos. Es muy similar en la vida de fe. Antes de creer en Dios por grandes cosas, debemos edificar nuestra fe lo suficiente para obtenerlas. La fe es un proceso y la construimos de manera que tengamos la fuente necesaria para recibir esas cosas que deseamos.

El primer estado de la fe es el estado de la fe que viene.

2. El nivel de adolescencia – La fe crece – El segundo nivel del proceso de la fe, es el estado de adolescencia o el de la fe que crece. Una vez que tenemos fe por algo, el próximo paso es empezar a ejercitar esa fe y fortalecerla. Ejercitar la fe es el proceso donde la edificamos hasta llegar al punto donde puede superar los obstáculos que están en contra.

Usualmente se entiende que la fe es como una semilla. Si vemos el ejemplo natural de la semilla, veremos que la semilla tiene un potencial para crecer, pero no está desarrollada todavía. Una semilla tiene el mismo potencial que un árbol totalmente desarrollado, para producir un campo entero de árboles. El único detalle es que todavía no está desarrollada. Nuestra fe tiene un potencial enorme. Muchas veces Dios no es el que desarrolla ese potencial, nosotros somos los que debemos hacer lo que sea necesario, para que nuestra fe madure como si fuese un músculo o una semilla.

3. El nivel adulto – La fe habla – El último nivel de la fe se alcanza cuando la fe habla. El verdadero signo de la madurez espiritual es visible cuando su fe habla. Hemos alcanzado la madurez, cuando nuestras palabras han cambiado, para estar de acuerdo con la manera en que creemos. Los creyentes maduros saben cómo disciplinar sus palabras para que estén de acuerdo a la manera que desean vivir. Nuestras palabras tienen poder creativo. Proverbios 18:20-21 nos muestra que la muerte y la vida están en el poder de nuestra lengua. Nosotros creamos nuestro futuro con nuestras palabras.

El ciclo de vida de la fe

Este proceso es llamado “El ciclo de vida de la fe.” Nos muestra que la fe pasa por un proceso para entrar en la madurez. Nosotros como creyentes hacemos lo que tenemos que hacer para producir fe en nuestras vidas, entonces hacemos lo necesario para hacerla crecer y nos disciplinamos para hablar las cosas correctas. Una vez que completamos este ciclo, ponemos nuestra fe en algo más. Nuestra fe siempre debe estar en proceso de crecimiento. Como es un ciclo, debemos desarrollar cada parte. Las tres partes del ciclo son importantes, si una parte se rompe el resultado será una fe fallada o una falta de fe.

La medida de la fe

Si fallamos en recibir no es porque carecemos de fe, cada uno tiene fe. Romanos 12:3 dice que Dios dio fe a cada creyente. Depende solamente de lo que hacemos con esa fe.

Romanos 12:3 – Digo, pues, por la gracia que me es dada, a cada cual que está entre vosotros, que no tenga más alto concepto de sí que el que debe tener, sino que piense de sí con cordura, conforme a la medida de fe que Dios repartió a cada uno.

Muchas personas se confunden cuando leen esta Escritura. Ellos piensan que Dios le da a cada persona diferentes cantidades de fe, dependiendo de cómo El se siente, es así que creen que Dios da a unos una fe grandiosa, a otros una pequeña fe y a otras una mínima fe. Pero eso no es lo que el versículo está diciendo. Para que podamos entenderlo mejor, podríamos decir que Dios da a cada hombre “una medida de fe”, esto quiere decir que Él da a cada persona la misma medida de fe, la medida de una semilla.

Lucas 17:6 “Si tuvierais fe como un grano de mostaza, podríais decir a éste sicómoro: desarráigate y plántate en el mar, y os obedecería.”

Nuestra fe, cuando nos es dada, es como una semilla. Es muy pequeña, pero tiene la naturaleza de una semilla, ella puede crecer. Tiene el potencial para crecer hasta el tamaño de la fe de Jesús, pero nosotros debemos hacer lo necesario para que ella crezca, su crecimiento será el resultado de lo que hagamos con ella.

Preguntas de Aplicación

1. Explique que quiere decir la frase “nuestra fe tiene la naturaleza de una semilla”.

2. Explique los diferentes niveles del ciclo de la fe.