“Hasta que todos lleguemos a la unidad de la fe y del
conocimiento del Hijo de Dios, a un varón perfecto, a la medida
de la estatura de la plenitud de Cristo”. Efesios
4:13
¿Qué tipo de iglesia te gustaría tener? ¿Qué tipo de familia te
gustaría tener? ¿Qué tipo de matrimonio te gustaría tener? Cuando
yo era niño tenía siempre un ideal. Recuerdo que por ese ideal
pasaron obviamente mi papa, mi hermano, un primo, etc. todos
ellos tenían o tienen características que dije en alguna ocasión
“yo quiero ser igual que ellos”. En la iglesia me sucedió lo
mismo, siempre tuve un ideal. Ahora que he crecido tengo otros
ideales, siempre me han inspirado grandes hombres de Dios y
grandes hombres de negocios. Normalmente esos ideales cambian,
pero cada vez el ideal que se fortalece mas en mi vida en Cristo
Jesus.
La iglesia debe ser así, ese ideal siempre debe estar claro en
nuestras vidas. El cristianismo esta tan devaluado hoy en día,
que mucha gente ya no encuentra diferencia entre lo mundano y
nosotros. La única diferencia que ellos ven es que algunos se
visten diferentes, otros portan sombrillas, unos andan en
bicicleta otros prohíben esto o aquello. “Aquellos son los que se
reúnen y no hablan con nadie”. ¿Qué hemos hecho con el evangelio
que Dios nos entrego? ¿Ya no vemos diferencia entre los
cristianos de hoy en día y el mundo?.
Mucho tiene que ver cómo nos tratamos nosotros mismos entre
cristianos, tarde o temprano ellos se darán cuenta y muchas veces
dirán: “son iguales, no han cambiado, viven en pleitos y en
divisiones”.
Ejemplo:
Hoy al
cristiano lo identificamos por la forma en que
canta
Ahora decimos si canta así es de esta religión, si se viste así
es de esta religión, si hace esto es de tal denominación. ¡Esas
son nuestra principales características!. ¿En dónde nos perdimos?
¿En donde equivocamos el rumbo? ¿Quién nos estorbo? ¿En donde se
perdieron los valores cristianos? ¿En donde perdimos la verdadera
identidad? Es triste decirlo pero como cristianos hacemos más
división que unidad. Es triste decirlo pero como cristianos nos
peleamos más y somos más envidiosos y celosos que la gente del
mundo. ¿En dónde nos perdimos?.
Ahora… si un hijo de Dios se cae, no unimos con el mundo y si es
posible lo pateamos y lo hundimos de igual manera que lo hace el
mundo. Es triste decirlo pero dentro de la iglesia también están
los peores ejemplos. Cuando yo era niño y asistía a los
embajadores, me toco ver dos o tres maestros de la iglesia que
abandonaron a sus esposas y se fueron con una más joven. Es
triste decirlo pero los peores ejemplos muchas veces están dentro
de la iglesia.
Ejemplo:
Hoy en día
llamamos cristiano al que aparentemente le va
bien
El otro día le pasó algo desagradable a un hermano y uno de los
líderes de la iglesia le dijo: “Esto te pasa por andar mal, eso
te pasa por no ir a la iglesia, te falta orar más, te falta ser
mas espiritual, estás haciendo algo mal”. Creemos que en el hacer
las cosas esta la bendición. Hemos rebajado el cristianismo a
solo “hacer cosas”… enseño en la iglesia, asisto en la iglesia,
canto, ofrendo, diezmo… Reconozcamos hermanos que muchas veces
hemos dado el mensaje equivocado. La iglesia no está haciendo la
diferencia en el mundo. No son las cosas que hacemos las que nos
diferencian. No son las cosas que hacemos que nos dan identidad.
No es como me visto, no es como tomo la biblia, no es que venga
todos los domingos a la iglesia. No es que pertenezca a tal o
cual denominación o religión. No son esas cosas las que me hacen
ser un hijo de Dios.
La unidad
no se hace sola
Cuando inicie este mensaje te pregunte ¿Qué tipo de iglesia te
gustaría tener? ¿Qué tipo de familia te gustaría tener? ¿Qué tipo
de matrimonio te gustaría tener? La unidad no se hace sola, ni va
a venir como de improvisto. ¡Se tiene que trabajar para lograr la
unidad!
“Esfuércense por mantener la unidad del Espíritu
mediante el vínculo de la paz”. Efesios 4:3
Esto me recuerda que hay que estar siempre alertas en
trabajar en la unión o unidad:
“Dijo Jesús a sus discípulos: Imposible es que no
vengan tropiezos; mas !!ay de aquel por quien vienen!” Lucas
17:1
El mundo vive una falsa unidad, el mundo vive una falsa ayuda, el
mundo vive una falsa religión, el mundo vive una falsa unidad
política. ¡Una falsa amistad! ¡Una falsa confianza!. Pero la
iglesia tiene lo verdadero. El verdadero amor, la verdadera
unidad, el verdadero respeto, el verdadero cariño, la verdadera
integridad. A la iglesia se le ha entregado el verdadero mensaje
del amor que cambia familias, que cambia iglesias, que cambia
ciudades, que cambia pueblos.
¡Grábate esta frase!
“Hasta que
todos lleguemos a la unidad de
la fe y del conocimiento del Hijo de Dios, a un varón perfecto, a
la medida de la estatura de la plenitud de Cristo”. Efesios
4:13
La iglesia debe ser reproductora de pastores, maestros,
apóstoles, evangelistas, ministros, profetas, servidores de Dios,
misioneros, etc, etc.
“Y él mismo constituyó a unos, apóstoles; a otros,
profetas; a otros, evangelistas; a otros, pastores y maestros, a
fin de perfeccionar a los santos para la obra del ministerio,
para la edificación del cuerpo de Cristo” Efesios
4:11-12
A fin de
perfeccionar a los santos..
Buscamos gente perfecta, pero la unidad no se logra buscando
gente perfecta, se logra trabajando para presentar perfectos a
los hombres delante de Dios. Todos alcanzamos de la gracia de
Dios, es un solo cuerpo y es una sola iglesia.
“A quienes Dios quiso dar a conocer las riquezas de
la gloria de este misterio entre los gentiles; que es Cristo en
vosotros, la esperanza de gloria, a quien anunciamos, amonestando
a todo hombre, y enseñando a todo hombre en toda sabiduría, a fin
de presentar perfecto en Cristo Jesús a todo hombre; para lo cual
también trabajo, luchando según la potencia de él, la cual actúa
poderosamente en mí”. Colosenses 1:27-28
Nos hemos degastado trabajando y buscando perfección en los
hombres y mujeres de Dios. Es decir nos hemos enfocado en el
fruto, no en plantar para cosechar fruto.
Esto pasa hasta en las mejores familias, esto pasa hasta en las
mejores iglesias. No me mal entiendas una cosa es estar
consientes para actuar en conformidad con la palabra y otra cosa
es decir “bueno esto nunca va a cambiar”.
¡Estar consientes para no desviarnos de la unidad!
“Hasta que todos lleguemos”
No te olvides:
“Hasta que todos lleguemos”
Trabajemos en nuestros ministerios y no en querer sacar el fruto
sin haber sembrado, sin haber regado el plantío, sin haber
cuidado de la siembre. El fruto es el trabajo de Dios y de su
Espíritu Santo, nuestro trabajo es cooperar haciendo nuestra
parte y yo creo que todos podemos tomar esta actitud.
“Hasta que todos lleguemos”
¿Porque es importante tomar esta actitud?
Si mi hermano se equivoca, si mi hijo se equivoca, si mi esposa
se equivoca, si yo me equivoco, entonces debo recordarme:
“Hasta que mi hermano(a) llegue”
“Hasta que mi hijo llegue”
“Hasta que mi esposa(o) llegue”
Y si yo me equivoco (lo más difícil de reconocer y perdonarnos a
nosotros mismos):
“Hasta que yo llegue”
Hasta que todo tengamos el mismo sentir, la misma actitud de
decir:
“Hasta que todos lleguemos a la unidad de la fe y del
conocimiento del Hijo de Dios, a un varón perfecto, a la medida
de la estatura de la plenitud de Cristo”. Efesios
4:13
Este es el camino que Dios nos enseña para alcanzar la unidad y
conocer la plenitud de su hijo Jesucristo.
¿Has cometo algún error?, ¿te has portado demasiado exigente
contigo mismo o con los demás? ¿Has provocado división en lugar
de unidad? ¿Quiere hoy cambiar de rumbo, cambiar de actitud?
¿Quieres reconocer que has estado mal enfocado(a)?
Pidamos a Dios sabiduría para todos tangamos esta actitud:
“Hasta que todos lleguemos a la unidad de la fe y del
conocimiento del Hijo de Dios”
Bendiciones
Abdiel Salas
Leer Hasta que todos lleguemos en Blog Cristiano de Abdiel Salas
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