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Foto: Freyja – Creative Commons |
Cuando acepto mis errores y defectos frente a mi misma, le abro paso al cambio y al crecimiento personal en mi vida.
Hoy me doy permiso para no ser perfecta
Acepto mis defectos y las debilidades de mi personalidad. No me voy a sentir culpable por haber metido la pata una y otra vez. Me acurruco en los brazos de Dios donde recibo amor, perdón, comprensión y dirección.
Hoy me doy permiso para recibir un cariñito de Dios
Su presencia absorbe mis preocupaciones y me llena de paz. Me rindo ante el suave susurro de su voz, que me arrulla y me hace sentir segura.
No permitas que nada te separe del amor de Dios, porque saber que Él te ama te habilita a ser más que vencedor en tu vida.
Joyce Meyer
Hoy me doy permiso para comenzar de nuevo
Darme por vencida es un acto de cobardía, por eso cada nuevo amanecer sacudo el polvo de mis zapatos, dejo que Dios vende mis heridas y sigo el camino que me lleva al descubrimiento de mi propósito y a colonizar mi potencial.
Hoy me doy permiso para aceptar las cosas que no puedo cambiar
Recibo la provisión de GRACIA y MISERICORDIA que Dios ha dispuesto para mí en este día. No me voy a cargar, no me voy a frustrar. Los planes de Dios son perfectos, aunque mis circunstancias presentes no lo sean. Estoy creciendo, estoy mejorando.
Los obstáculos y los fracasos deben ser vistos como escaleras que nos conducen a la realización de nuestras metas.
Hoy me doy permiso para cambiar las cosas que puedo cambiar
Cero vagancia, cero desánimo, cero pereza. Mi meta es mejorar cada día, aunque sea poco a poco.
Dios va al paso que yo puedo andar. Me sustenta, me equipa, me anima, me da la victoria.
Las normas del señor son rectas y alegran el corazón. Sus mandamientos son puros y nos dan sabiduría.
Salmo 19:8 (TLA)
¡Feliz Semana! J
Sandy
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