Una nueva sugerencia que se propone acerca de cómo la vida hubiera finalmente constituida exclusivamente por aminoácidos levógiros resulta vacía.
Fragmento del meteorito caído en el Lago Tagish, Columbia Británica, el 18 de enero de 2000, en el que se han descubierto unos excesos quirales en dos aminoácidos. Fotografía cortesía de NASA.
Un comunicado de pensa del centro Goddard de la NASA comunicaba que unos aminoácidos descubiertos en el meteorito del Lago Tagish (Columbia Británica, 2000) exhibían alguna preferencia por el ácido aspártico levógiro, pero con menor exceso para la alanina. Como suele suceder, los medios de comunicación de cariz científico (p. ej., Astrobiology Magazine, Science Daily, PhysOrg) y blogs (p. ej., Darwiniana) se hicieron eco de una manera acrítica del comunicado de prensa, con ilustraciones y todo, de modo que desde este blog se tratará de hacer lo que ellos debieran haber hecho: evaluar la pertinencia de lo que se afirma y considerar si resuelve el recalcitrante problema de la homoquiralidad en biología (para antecedentes, véase bajo la etiqueta homoquiralidad).
Estos son los problemas que se admiten en el comunicado de prensa:
Sólo se mencionaban 2 de los 20 aminoácidos usados por la vida.
El exceso de un enantiómero era de 4 veces para el ácido aspártico, pero de solo un 8% para la alanina.
Los científicos no conocen qué proceso creó el exceso, pero no fue la luz polarizada, porque tuvo que ocurrir dentro del meteorito. «Quizá» se debió a las propiedades de la cristalización.
Los aminoácidos del meteorito eran ricos en carbono-13, no en el carbono-12 común en la vida.
Un astrobiólogo admitió: «Las proteínas sintéticas creadas usando una mezcla de aminoácidos levógiros y dextrógiros simplemente no funcionan».
Los aminoácidos levógiros y los azúcares dextrógiros se mencionan como «condición previa imprescindible para la vida».
Todos los métodos ordinarios para crear aminoácidos de manera sintética resultan en mezclas equilibradas de aminoácidos levógiros y dextrógiros.
Este descubrimiento complica la búsqueda de vida extraterrestre, porque significa que el descubrimiento de moléculas de una sola especie quiral pudiera no constituir un biomarcador.
Aquí hay más problemas que no se mencionan en el comunicado de prensa:
La vida exige una pureza quiral de un 100%.
Un mero «exceso» no es suficiente; un solo aminoácido de la especie quiral contraria arruina la cadena de proteína.
Los astrobiólogos siguen sin teoría acerca de cómo el meteorito enriqueció una especie quiral en el ácido aspártico.
Los astrobiólogos siguen sin teoría acerca de cómo una «célula» prebiótica acabó constituida de aminoácidos levógiros con una pureza del 100%.
Su analogía de «bola de nieve» para ilustrar cómo los cristales podrían amplificar el exceso carece de valor, porque las células hubieran tenido que incorporar aminoácidos en solución, y no como cristales.
En el artículo aparecían las usuales palabras ilusorias como quizá, pudiera y pudo una docena de veces.
El artículo dice que se precisa de experimentación adicional.
Resumiendo, siendo que el comunicado de prensa no propone ninguna teoría física para el exceso enantiomérico ni tampoco ninguna hipótesis susceptible de prueba acerca de cómo se originó el exceso, cómo se hubiera podido mantener o cómo se hubiera podido incorporar para formar la vida, el comunicado de prensa añade poco más que lo meramente anecdótico al misterio de la homoquiralidad, y desde luego nada por vía de conocimiento.
El mismo viejo cuento; durante más de una década se han estado pronunciando incoherencias entre dientes (p. ej., El misterio de las proteínas levógiras: ¿está resuelto?, y ¿Se han logrado explicar los aminoácidos levógiros de forma natural?; buscar en «homoquiralidad» para la cadena de artículos que tratan el tema). La explicación materialista se manifiesta impotente ante la necesidad de una selección inteligente de unas moléculas con unas propiedades espaciales determinadas, más allá de la química. Las observaciones tienen su explicación en un diseño deliberado. El materialismo no puede hacer otra cosa que enfrentarse impotente a la evidencia de la realidad del designio trascendente, de la acción de Dios en la creación. Designio deliberado, selección, plasmación de un propósito: Ahí es donde se resuelve el enigma.
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Fuente: Creation·Evolution Headlines – Left-Handed Amino Acid Puzzle Remains 28/07/2012
Redacción: David Coppedge © 2012 Creation-Evolution Headlines – http://crev.info/
Traducción y adaptación: Santiago Escuain — © SEDIN 2012 – www.sedin.org
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Publicado por Santiago Escuain para SEDIN – NOTAS y RESEÑAS el 7/30/2012 07:49:00 PM
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