Echando toda vuestra ansiedad sobre él

“Humillaos, pues, bajo la poderosa mano de Dios, para que él os exalte cuando fuere tiempo; echando toda vuestra ansiedad sobre él, porque él tiene cuidado de vosotros”. 1 Pedro 5:6-7

 

La ansiedad (del latin anxietas, ‘angustia, aflicción’) es una respuesta emocional o conjunto de respuestas que engloba: aspectos subjetivos o cognitivos de carácter displacentero, aspectos corporales o fisiológicos caracterizados por un alto grado de activación del sistema periférico, aspectos observables o motores que suelen implicar comportamientos poco ajustados y escasamente adaptativos.

La ansiedad tiene una función muy importante relacionada con la supervivencia, junto con el miedo, la ira, la tristeza o la felicidad. En la actualidad se estima que un 20.5% o más de la población mundial sufre de algún trastorno de ansiedad, generalmente sin saberlo.

*Fuente Wikipedia

 

Se dice también que la ansiedad es una preocupación o estrés, la ansiedad también es un temor sobre algo. A mí se me hace difícil saber los limites de cuando la ansiedad se convierte en temor o hasta depresión. Hay muchos escritos en internet sobre la ansiedad y sus síntomas. En los cuales encuentro que los síntomas afectan, la mente, la conducta y el cuerpo.

 

Cualquier preocupación, angustia o temor se puede convertir en ansiedad. Invade la mente y el cuerpo de tal manera que puede convertirse en enfermedad.  Cuando se está expuesto a una ansiedad prolongada puede haber efectos sobre el cuerpo. Todo inicia en la mente, la mente es la parte más vulnerable pero que llega a afectar muchas áreas de la vida.

La manera en que uno ve las situaciones o de la manera en que se interpretan, es determinante. De la manera en que me preocupan será determinante para mi postura de ahí en adelante.

Por ejemplo. Hay pensamientos tan fuertes que llegan a dominar el alma, las emociones y el cuerpo. Afectar el cuerpo significa que ese estado de estrés o ansiedad cambiaran la forma de operar de nuestros organismos, afectando la producción de químicos y otras reacciones en el cuerpo. No soy médico por lo tanto me limitaré en hablar de mi experiencia y de lo que dice la biblia al respecto. La biblia dice:

 

“echemos toda vuestra ansiedad sobre él”

 

La razón que se expone aquí para liberarnos de la ansiedad es:   “porque Dios tiene cuidado de nosotros”.

Está en una manera muy sencilla pero a la vez es un gran paso para liberarnos de la ansiedad. Echar nuestra ansiedad sobre Dios, no es quitarnos la responsabilidad. Es simplemente confiar en que Dios está interesado en todos nuestros asuntos pero además el nos ayuda.

 

Echar la ansiedad sobre Jesús, es confiar plenamente que el va a cumplir su promesa de protección y cuidado.

 

“Mis ovejas oyen mi voz, y yo las conozco, y me siguen, y yo les doy vida eterna; y no perecerán jamás, ni nadie las arrebatará de mi mano. Mi Padre que me las dio, es mayor que todos, y nadie las puede arrebatar de la mano de mi Padre. Yo y el Padre uno somos.” Juan 10:27-30

 

Hablando del cuidado y la importancia que Dios nos tiene, el pone ejemplos muy insignificantes. ¿Si a Dios le interesa el numero de tus cabellos, no le interesaran otros asunto más importantes para ti? Contarse los cabellos de su cabeza tal vez sería una tarea que a pocos les interesaría ¿Cuántas personas estarían dispuestos a invertir cinco o seis horas para algo tan trivial como saber el número de cabellos en tu cabeza? Hasta ahora yo no he conocido a una persona que me diga: “Ayer me pase la tarde contándome los cabellos y fueron  22548766522”.

 

“Pues aun los cabellos de vuestra cabeza están todos contados. No temáis, pues; más valéis vosotros que muchos pajarillos”. Lucas 12:7

   

¿Si a Dios le interesa el numero de cabellos de nuestra cabeza, no le interesan más como nos sentimos y que cosas nos preocupan?

“echemos toda vuestra ansiedad sobre él”

Echar toda nuestra ansiedad sobre él, es confiar en que Dios nos ama y le interesan nuestros asuntos, pero aun mejor:

 

“ porque él tiene cuidado de vosotros”.

 

 Echar toda nuestra ansiedad sobre él, es dejarnos cuidar por él. Confiar que el esta es las etapas o episodios más difíciles de nuestra vida. Simplemente porque le interesamos, somos importantes para él.

 

Pero la parte más importante de esta enseñanza es que al confiar en él, estamos humillándonos antes su majestad, su poder y su grandeza.

 

“Humillaos, pues, bajo la poderosa mano de Dios, para que él os exalte cuando fuere tiempo; echando toda vuestra ansiedad sobre él, porque él tiene cuidado de vosotros”. 1 Pedro 5:6-7

 

Echar toda nuestra ansiedad sobre él, es ser humildes ante Dios. Reconociendo que el cumplirá todo lo que el promete en su palabra. ¿Cómo debemos echar nuestra ansiedad sobre él?

 

¿Está alguno entre vosotros afligido? Haga oración. ¿Está alguno alegre? Cante alabanzas. ¿Está alguno enfermo entre vosotros? Llame a los ancianos de la iglesia, y oren por él, ungiéndole con aceite en el nombre del Señor. Y la oración de fe salvará al enfermo, y el Señor lo levantará; y si hubiere cometido pecados, le serán perdonados. Confesaos vuestras ofensas unos a otros, y orad unos por otros, para que seáis sanados. La oración eficaz del justo puede mucho. Santiago 5:13-16

 

Es muy simple:

 

“Padre en esta hora, decido echar toda mi ansiedad sobre ti, toda preocupación, todo lo que está fuera de mis manos hacer, te pido que tu lo tomes. Padre ayúdame a no tomar esas preocupaciones y cargas de las cuales yo no puedo llevarlas. Ayúdame a descansar en tu palabra y sobre las bendiciones que tu declaraste en tu palabra”.

Hoy decido vivir en completa confianza de que mis asuntos te interesan y por lo tanto tú estás haciendo algo para que todas las cosas ayuden para bien. Yo decido echar toda la ansiedad sobre ti, todas mis cargas y preocupaciones. Tu palabra dice:

 

“Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os haré descansar. Llevad mi yugo sobre vosotros, y aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón; y hallaréis descanso para vuestras almas; porque mi yugo es fácil, y ligera mi carga”. Mateo 11:28-30

 

Padre, hoy decido descansar en ti. Te alabo y te bendigo porque eres bueno y un Padre de amor.

 

Dios te bendiga y te guarde y haga resplandecer su rostro sobre ti.

 

[email protected]

 

Leer Echando toda vuestra ansiedad sobre él en Blog Cristiano de Abdiel Salas


Comentarios

Una respuesta a «Echando toda vuestra ansiedad sobre él»

  1. Bendijo mi vida y me ayudo a como combatir la ansiedad

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