El Dios del Señor se acerca (Primera parte)

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Joel 1:15

“¡Ay del día! porque cercano está el día de Jehová, y vendrá como destrucción por el Todopoderoso.”

Lucas 21:25-28

“Entonces habrá señales en el sol, en la luna y en las estrellas, y en la tierra angustia de las gentes confundidas a causa del bramido del mar y de las olas; desfalleciendo los hombres por el temor y la expectación de las cosas que sobrevendrán en la tierra: porque las potencias de los cielos sera conmovidas”.

2 Pedro 3:1:10

“Amados, esta es la segunda carta que os escribo, y en ambas despierto con exhortación vuestro limpio entendimiento, para que tengais memoria de las palabras que antes han sido dichas por los santos profetas, y del mandamiento del Señor y Salvador dado por vuestros apóstoles; sabiendo primero esto, que en los postreros días vendrán burladores andando según sus propios malos deseos, y diciendo: ¿Dónde está la primesa de su advenimiento? Porque desde el día que los padres durmieron todas las cosas permanecen así como desde el principio de la creación.

Estos ignoran voluntariamente, que en el tiempo antiguo fueron hechos POR LA PALABRA DE DIOS los cielos y también la tierra, que proviene del agua y por el agua subsiste, por lo cual el mundo de entonces pereció anegado en agua;

pero los cielos y la tierra que existen ahora están reservados por la misma palabra, guardados para el fuego en el día del juicio y de la perdición de los hombre impíos.

El Señor no retarda su promesa, según algunos la tienen por tardanza, sino que es paciente para con nosotros no queriendo que NINGUNO PEREZCA, SINO QUE TODOS PROCEDAN AL ARREPENTIMIENTO.

Pero el Día del Señor vendrá como ladrón en la noche; en el cual los cielos pasarán con grande estruendo y los elementos ardiendo serán deshechos, y la tierra y LAS OBRAS QUE EN ELLA HAY SERÁN QUEMADAS”. 

Hermanos, estas palabras de las Escrituras sin tremendas. No las oimos muy a menudo pero debemos recordarlas porque son profecias que están por cumplirse, y cada día las señales están mas cerca. Sabemos que todo lo que Señor ha dicho por medio de Sus profetas se tiene que cumplir.

En el pasado hemos visto desastres horrendos, donde miles de personas han muerto debido a una catastrophe natural. A pesar de que murieron mucha gente, esas catástrofes no son NADA en comparación con lo que se avecina.

Arriba hemos leido que el Señor es muy misericordioso y paciente, y todavia no ha destruido este mundo por segunda vez porque le está dando tiempo a la gente para arrepentirse. Mucho tiempo, miles de años. Dios es bueno con todos, y aunque las condiciones de vida son malas para muchos, de todas formas Dios continua proveyendo para las necesidades de la mayoría de nosotros. Lo triste del caso es que muchos ni lo reconocen ni le dan gracias.

Lo que va a pasar al final de los tiempos decretados por el Señor es lo mas horrible que se puede nadie imaginar. Dios es muy paciente y espera . . . pero su paciencia tiene un límite, y cuando se alcance ese límite, Su ira se va a derramar de forma abrumadora y aterrante. La gente huirá a esconderse pero será en vano.

Por eso, les animo a meditar en estas cosas y a compartirlas con sus familiares, amigos y conocidos. El Día del Señor se acerca a pasos agigantados. Todas las señales están con nosotros y el tiempo apremia. Esa es nuestra responsabilidad, y el Señor espera que la cumplamos.

Santa Biblia, vs. Reina Valera


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