El que al pobre da, a JEHOVA presta.

Proverbios 19:17 «A Jehová presta el que da al pobre. » Un préstamo al pobre es un préstamo al Señor, y el Señor mismo pagará la deuda”.
El que al pobre da, le presta a Dios. «Cuando le ayudas al pobre, a Dios le prestas; y El paga admirables intereses sobre el préstamo”.
Dios se identifica con el pobre ¿Sabía usted que dar de comer al que tiene hambre, dar de beber al sediento, vestir al desnudo, en una palabra; bendecir al pobre, tiene garantía de Dios? Su Palabra dice que Él pagará la deuda. Cuando Dios devuelve, lo hace doblemente, cuatro veces, siete veces o cien veces lo aportado.

La caridad hacia el pobre y necesitado se percibe como un préstamo a Dios. O sea, que si uno le presta a alguien, en el fondo le presta a Él, quien lo reembolsará por completo. De la preocupación de Jehová por el pobre, están colmadas las Escrituras.

El deber de ser caritativo incluye dos cosas: 1. el principio interior de la caridad en el corazón. El necesitado de ayuda, no necesariamente es en forma de dinero. 2. Generosidad. No sólo hemos de tener compasión del pobre, sino que hemos de ayudarle efectivamente, de acuerdo con su necesidad y con nuestras posibilidades (Santiago 2,15-16).

El Señor pagará un interés tan alto que superará con mucho el capital que le hayamos prestado al ayudar al necesitado.

“Y cualquiera que le da siquiera un vaso de agua fresca a uno de estos pequeños por ser seguidor mío, les aseguro que tendrá su premio» (Mateo 10, 42). No quedará inadvertida ninguna bondad hecha a un seguidor de Jesús.

Hasta un vaso de agua fresca será ricamente recompensado sí se da a un discípulo por cuanto es seguidor del Señor.

DIOS le bendiga


Comentarios

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.