Una escuela de niñas indias ha recibido fusiles de asalto AK-47, y son entrenadas en el manejo de pequeñas armas, bazocas, artillería, fusiles de asalto y lucha cuerpo a cuerpo para que sean capaces de defenderse de los militantes islámicos.

Todavía puede que usen trenzas, pero viven en el turbulento norte de Jammu y Cachemira, y estas chicas no son ajenas a la violencia. Una de ellas que perdió a su abuela en un ataque de jiyadistas musulmanes está dispuesta a aprender.
“Se nos ha enseñado el uso de armas de asalto y hemos aprendido mucho. Nos pareció muy agradable”. Tropas militares están enseñando a las niñas a defenderse por sí mismas y a sus pueblos de las frecuentes escaramuzas en la disputada región de Cachemira.
“Esto se hace básicamente para proporcionarle capacitación a las niños, especialmente niñas, que viven cerca de la línea de control fronterizo para que sepan utilizar las nuevas armas y también el manejo de fusiles, por lo que si se presenta cualquier tipo de emergencia, las niñas podrían estar listas para defenderse”. El año pasado, una niña en el valle de Cachemira detuvo sin ayuda de nadie a un grupo de milicianos musulmanes que irrumpieron en su casa.