1 Pedro 1:13-16
“Por tanto, ceñid los lomos de vuestro entendimiento, sed sobrios y esperad por completo en la gracia que se os traerá cuando Jesucristo sea manisfestado; como hijos obedientes, no os conformeis a los deseos que antes teníais estando en vuestra ignorancia sino como aquel que os llamó es santo, sed también vosotros santos en toda vuestra manera de vivir porque escrito está: Sed santos, porque yo soy santo”.
La palabra Cristiano solo ocurre tres veces en el Nuevo Testamento, lo que leemos repetidamente es la palabra discipulo.
El discípulo está cerca de su Maestro, lo escucha y vive el llamado de Jesús a ser transformado mediante la renovación de su mente. Aprende de su Señor.
En el mundo hay hoy día varias corrientes que están afectando a la iglesia. Vamos a ver algunas de ellas.
1. EL PLURALISMO
Esta corriente dice que todos los ismos son aceptables y válidos. El feminismo, el ateismo, el evolucionismo, etc. etc. Nosotros no podemos aceptar esto sino que debemos declarar el character único de Jesucristo y sus enseñanzas. El es el Camino, la Verdad, y la Vida.
2. EL MATERIALISMO
Esto es un obsesión por las cosas materiales y sofoca la vida espiritual. Job dijo: “Desnudo sali del vientre de mi madre y desnudo volveré allá. Jehová dió y Jehová dió y Jehová quitó; bendito sea el nombre de Jehová”. Sería bueno vivir “light”.
3. EL RELATIVISMO
El relativismo se nota en particular en el area de la sexualidad. Se acepta tener relaciones libres, vivir juntos sin casarse, fuera del matrimonio o las relaciones entre miembros del mismo sexo.
El señorio de Cristo es primordial en la conducta Cristiana, ¿o nos damos la libertad para elegir lo que nos gusta y rechazar lo que no nos gusta? Recordemos las palabras de Jesús: “No todo el que me dice: Señor, Señor entrará en el reino de los cielos, sino el que hace la voluntad de mi Padre que está en los cielos”.
Hay dos sistemas de valores. 1. El del mundo 2. La voluntad de Dios.
EL NARCISISMO
El amor excesivo por uno mismo. El movimiento del potencial humano mirando hacia si mismo. Amarse a si mismo es el enfasis.
Sin embargo, Jesús nunca dijo que nos amaramos a nosotros mismos. Lo que dijo fue:
1. Amarás a Dios sobre todas las cosas.
2. Amarás al projimo como a ti mismo.
Se sabe que nosotros siempre nos amamos a nosotros mismos primero, segundo y tercero. No tenemos que aprender a hacerlo. Desde pequeños sabemos muy bien ser egocéntricos y pensar en nosotros primero siempre.
Los discipulos de Jesus debemos aprender a nadar contra la corriente y no conformarnos al mundo como juncos o camaleones, sino buscar transformar nuestra mente de acuerdo a la Palabra de Dios.
Romanos 12:1-2.
Santa Biblia, vs. Reina Valera
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