Puesto que cuando Dios creó al hombre puso eternidad en él, una aspiración de todo ser humano es vivir para siempre; es por esta razón, que por siglos se ha dado la humanidad a la búsqueda de la fuente de la eterna juventud, y así evitar la muerte. Sin embargo, según La Palabra de Dios la muerte no es el final, pues todos tendremos que comparecer ante el tribunal de Dios llegado el momento.
En Génesis encontramos que José, un hombre que siempre tuvo su vida atada a los propósitos y designios de Dios. Por fe sabía que Dios visitaría a la nación israelita, y predijo que un día saldrían de Egipto, y dió instrucciones para que sus huesos fueran llevados a la tierra prometida.
Pero mejor escuche el audio y gócese…
¡Que Dios le bendiga! Por la fe José, al morir, mencionó la salida de los hijos de Israel, y dio mandamiento acerca de sus huesos.
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