Qué hacer con sus cargas – Adrian Rogers

Hoy compartiremos sobre las cargas de la vida, esas cosas (asuntos, problemas, obstáculos) que hacen que nuestro camino sea mas difícil, y nuestra vida insoportable algunas veces, imagina subir una cuesta, entre mas carga se lleva mas ardua es la subida, mas lento el avance, así es nuestra vida cristiana, entre mas carga tengamos mas difícil es el camino y menos avanzamos.
Salmo 38:3 Nada hay sano en mi carne a causa de tu indignación; en mis huesos no hay salud a causa de mi pecado. Porque mis iniquidades han sobrepasado mi cabeza; como pesada carga, pesan mucho para mí.
Si amado hermano, tu te darás cuenta de esta realidad, cuando hemos pecado nos sentimos con una carga en nuestra conciencia que paraliza nuestro caminar, recuerda que como hijos de Dios tenemos una nueva naturaleza que no se deleita en el pecado, cuando pecamos nos sentimos muy cargados, por eso el Apóstol Pablo decía:
Hebreos 12:1 Por tanto, puesto que tenemos en derredor nuestro tan gran nube de testigos, despojémonos también de todo peso y del pecado que tan fácilmente nos envuelve, y corramos con paciencia la carrera que tenemos por delante,
Amado hermano, no dejes que la carga del pecado destruya tu vida, cuando pecamos y no hemos entendido el sacrificio de Cristo lo que hacemos es huir de Dios, no queremos ir a la Iglesia, no deseamos servir en la obra, empezamos a apartarnos y luego a enfriarnos, y esto es lo que el diablo quiere hacer, desviarnos del camino de Dios, pero Dios ha provisto una solución, ahora mismo puedes quitarte toda carga del pecado la escritura declara «el que confiesa su pecado y se aparta alcanzara misericordia», el Señor nos dice:
Hebreos 4:16 Por tanto, acerquémonos con confianza al trono de la gracia para que recibamos misericordia, y hallemos gracia para la ayuda oportuna.
El Señor esta esperando que llegues y que le confieses tu pecado para quitarte esa carga pesada, muchas veces aun luego de confesarle a Dios nuestras faltas uno siente que la carga sigue ahí, pero esto es porque «no nos hemos perdonado nosotros mismos», cuando tu confiesas y te apartas «en ese mismo momento» el Señor te perdona, ahora solo queda que tu te perdones, sigue adelante quítate esta carga hoy mismo y no dejes que detenga tu vida cristiana.




Comentarios

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.