Estudio Bíblico | Explicación de Proverbios 27:20 | Comentario Bíblico Online
Se comparan aquí tres cosas que nunca se sacian: El Seol o morada de los muertos, la destrucción (hebr. Abadah; aquí, sin vocales en el texto actual) que, probablemente, es, como el Seol, sinónimo del sepulcro, y los ojos del hombre, órganos que suscitan los deseos (comp. 1Jn 2:16), nunca satisfechos, del corazón humano. Pero los que tienen los ojos fijos en el Señor quedan satisfechos, y por siempre lo estarán. Aquí vale lo de Agustín de Hipona: «Nos hiciste, Señor, para ti, y está intranquilo nuestro corazón hasta que descanse en ti».