Salmos 7:1 Explicación | Estudio | Comentario Bíblico de Matthew Henry

Estudio Bíblico | Explicación de Salmos 7:1 | Comentario Bíblico Online

El título del salmo (v. 1 en la Biblia Hebrea) contiene dos términos sumamente oscuros. Shiggayón, que sólo aparece aquí y en Hab 3:1, es, según Ryrie, «quizá un canto extático». Según Arconada, correspondería entonces a nuestro ditirambo. De Kush el benjaminita no sabemos nada. Dice Ryrie: «Probablemente era uno de los escuderos de Saúl enviados a matar a David». Lo cierto es que David, ante tal abuso, recurre a Dios con ánimo tranquilo, sin permitir a su arpa notas disonantes. Las injurias que recibimos de los hombres, en vez de provocar nuestras pasiones, han de servir para avivar nuestras devociones.

1. Se pone bajo la protección de Dios (v. Sal 7:1): «Sálvame de todos los que me persiguen y líbrame del poder y de la maldad de ellos, para que no cumplan el deseo que abrigan contra mí». Apela: (A) A su relación con Dios (v. Sal 7:1): «Jehová Dios mío». Como si dijese: «Tú eres mi Dios, ¿a quién acudiré sino a ti?» (B) A su confianza en Dios: «En ti he confiado» (v. Sal 7:1). Como si dijese: «No he confiado en brazo de carne, sino en ti» (v. Jer 17:5-8). (C) A la perversidad y a la furia de sus enemigos y al peligro inminente en que se veía de ser devorado por ellos (v. Sal 7:2): «No sea que desgarren mi alma como león y me destrocen sin que haya quien me libre». Como si dijese: «Si tú no me libras, nadie me podrá librar».

2. Protesta solemnemente de su inocencia en cuanto a las cosas de que le acusan y, mediante una tremenda imprecación, apela a Dios, que escudriña los corazones, con respecto a su inocencia (vv. Sal 7:3-5). David no tenía en la tierra tribunal al que acudir, pero tenía en el Cielo un tribunal divino, con un justo Juez sentado en él, a quien él llama su Dios (vv. Sal 7:1, Sal 7:3). Le acusaban de planes siniestros contra la corona y la vida de Saúl, pero él lo niega terminantemente (v. Sal 7:4): «He libertado al que sin causa era mi enemigo». La Providencia le había puesto a Saúl a merced de él, y había entre los seguidores de David quienes le exhortaban a que le matara y aun estaban dispuestos a despacharlo ellos mismos, pero David se lo impidió, tanto cuando le cortó la orla del manto a Saúl (1Sa 24:4.), como cuando le quitó la lanza (1Sa 26:12), para mostrarle lo que podía haber hecho con él. «Si fuese culpable, dice (v. Sal 7:5), persiga el enemigo mi alma y alcáncela; huelle en tierra mi vida, y mi honra ponga en el polvo. Muerte e infamia estoy dispuesto a soportar si soy culpable.»

3. Teniendo a favor de su inocencia este testimonio de su conciencia, ruega humildemente a Dios que se muestre a favor suyo en contra de sus perseguidores y respalda cada petición con un motivo apropiado:

(A) Ruega a Dios que manifieste su ira contra sus enemigos (v. Sal 7:6): «Señor, ellos se enojan injustamente contra mí; enójate tú justamente contra ellos y hazles saber que estás airado; levántate, oh Jehová, en tu ira; álzate en contra de la furia de mis angustiadores».

(B) Ruega a Dios que mantenga en alto su causa: «Apréstate (lit. despierta) a defenderme en el juicio que has convocado para que se me haga justicia» (v. Sal 7:6); «vuélvete a sentar en lo alto, para que se reconozca universalmente que el mismo Cielo está a favor de la causa de David, puesto que es justa y legítima» (v. Sal 7:7). «Júzgame, oh Jehová, conforme a mi justicia, y pronuncia a mi favor veredicto de absolución (v. Sal 7:8); así te rodeará la congregación de los pueblos (lit.) y reconocerá la justicia de mi causa y la legitimidad de mi regio título» (v. Sal 7:7).

(C) Ruega, ahora ya más tranquilo, (a) para que la intervención de la providencia divina haga cesar la maldad de los inicuos (v. Sal 7:9); no aboga por la destrucción del pecador, sino por el cese del pecado. Así hemos de orar nosotros, aborrecer el pecado, pero amar a los pecadores por quienes Cristo murió (v. 1Ti 1:15); (b) para que el justo quede afianzado: protegido, asegurado, establecido. Así como hemos de orar para que disminuya el mal, así también hemos de orar para que aumente el bien.

Salmos 7:1 explicación
Salmos 7:1 reflexión para meditar
Salmos 7:1 resumen corto para entender
Salmos 7:1 explicación teológica para estudiar
Salmos 7:1 resumen para niños
Salmos 7:1 interpretación bíblica del texto