Significado de KENOSIS Según La Biblia | Concepto y Definición

KENOSIS Significado Bíblico

¿Qué Es KENOSIS En La Biblia?

Perspectiva que afirma que el eterno Hijo de Dios, en su encarnación, dejó algunos o todos los atributos divinos que no guardaban relación con una existencia humana plena. Este punto de vista se basa fundamentalmente en Flp 2:5-11, en especial en el v. 7, que declara que Cristo “se despojó a sí mismo”. La idea del autodespojo se toma del verbo griego kenoo que significa “vaciar”.
Otros pasajes escriturales que se citan para respaldar esta teoría son Mar 13:32, que muestra la falta de conocimiento de Cristo en cuanto al tiempo del fin, y Jua 11:34, donde aparentemente se demuestra la falta de omnisciencia de Jesús al no saber dónde yacía Lázaro.
Aunque el enunciado inicial de la kenosis de Cristo procuraba justificar plenamente la real humanidad de Jesús, en realidad constituye una seria agresión a la auténtica deidad de Jesucristo. La mayoría de los evangélicos han rechazado el concepto de la kenosis y lo han remplazado con lo que se podría llamar opinión subkenósica, que declara que lo que Cristo dejó de lado en la encarnación no fueron algunos o todos sus atributos divinos tales como omnisciencia, omnipotencia y omnipresencia. Más bien, Cristo “se despojó a sí mismo” del uso independiente de estos atributos a fin de vivir una vida humana normal. Su dependencia del Padre en cuanto a fortaleza y sabiduría aparecen en pasajes como Jua 5:19; Jua 5:30 y Jua 6:57. Así también, en Mat 12:22-30 se ve que Jesús echa fuera demonios por el Espíritu Santo (Mat 4:1; Mar 1:12; Luc 4:1). No hay duda de que esto es un valeroso intento por salvaguardar la plena humanidad de Jesucristo en tanto que también mantiene Su plena deidad como lo afirman claramente las Escrituras (Jua 1:1-14; Jua 8:58; 1Jn 5:20; Rom 9:5). No obstante, el problema sigue siendo si esta posición tiene éxito. A la luz de la clara afirmación paulina de que en Cristo habita corporalmente toda la plenitud de la deidad (Col 2:9), es necesario tratar de reconciliar esta cristología elevada y temprana con la comprensión teológica subkenósica de Flp 2:5-11. Esto pareciera imposible.
Una lectura alternativa del pasaje de Flp 2:5-11 proporciona una solución que descarta todo tipo de doctrina kenósica referente a Cristo. El verdadero interés de Pablo en Flp 2:1-30 no consiste en un Cristo preencarnado que se despoja a sí mismo en la encarnación, lo que igualaría la kenosis con Su encarnación. Más bien, con la expresión “se despojó a sí mismo” (heauton ekenosen) se alude a que el Cristo ya encarnado (ver Flp 2:5) está realizando una acción. Pablo está pensando en categorías escriturales y tiene en mente las profecías de Isaías sobre el siervo de Yahvéh (Flp 2:10-11 con Isa 45:23). Las palabras “se despojó a sí mismo” sugieren que el Cristo encarnado iba a derramar Su vida al tomar la posición de siervo y la semejanza humana (ya producida) como cumplimiento del paralelo conceptual de Isa 53:12 : “derramó su vida hasta la muerte”. A esto, Pablo le agrega “y muerte de cruz” (Flp 2:8).
En este pasaje, la encarnación es la presunción de la kenosis. Una comparación adicional de Flp 2:9 con Isa 52:13 demuestra que esta sección del “siervo” es el material utilizado por Pablo como fuente en todo este maravilloso pasaje cristológico. Por lo tanto, en este pasaje se puede defender una cristología elevada. Para Pablo, la encarnación era una suma, no una resta. La naturaleza humana fue agregada a la persona del Hijo de Dios. Jesucristo no era menos que Dios; Él era (y es) Dios. Como el Dios-hombre, Jesucristo dio Su vida en obediencia al Padre como rescate por muchos (Mar 10:45). Ver Cristo, cristología; Encarnación.

Doros Zachariades