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¿Que te falta? Es una pregunta siempre actual. Las necesidades van y vienen, algunas llegan otras se van. ¿Qué necesitas en este momento? ¿Dinero, salud, paz, alegría, amor, fe, esperanza? etc. Cuando tenemos necesidades, muchas veces nos equivocamos y buscamos como saciar nuestra hambre con comida envenenada, la vieja serpiente del edén, disfrazada de alimento falso, nos hace caer en la trampa. En tiempo de necesidad es fácil caer atrapado, el enemigo nos engaña y nos hace cometer errores que después estamos lamentando.

Algunos dicen: -Usted siempre asegura que basta creer para ser salvo. Discúlpeme, pero verdaderamente es demasiado sencillo. En realidad, creer es a la vez muy simple y muy difícil. Para un niño, ¿hay algo más fácil que apoyarse en el hombro de su madre? ¿O hay algo más natural que creer en la palabra de un amigo? Para alguien que se está ahogando, ¿es difícil aferrarse a la soga que le echan? Asimismo la fe es simple, casi espontánea y está al alcance de todos.

De todos los defectos de carácter, la deslealtad es seguramente uno de los peores. El hombre desleal actúa callado, en silencio, aparenta y finge que es amigo. El otro día recibí una carta de cierta persona que estaba indignada. Su mejor amigo, a quien había ayudado a ingresar en la empresa, lo traicionó cobardemente y le robó el cargo. “Podía esperar eso de cualquier otro, menos de quien consideraba ser mi mejor amigo”, decía la carta.

Un lobo fue elegido rey entre sus congéneres y decretó una ley ordenando que lo que cada uno capturase en la caza, lo pusiera en común y lo repartiese por partes iguales entre todos; de esta manera ya no tendrían los lobos que devorarse unos a otros en épocas de hambre.

Andre Agassi, grande estrella del tenis mundial, hizo un comercial de una determinada cámara fotográfica en que decía: "La imagen es todo". Esto es verdad. pero no la imagen somera y vanidosa de sí mismo. La imagen de Dios es todo. El hombre debe reflejar la imagen y semejanza de Dios.

Se cuenta la historia de un querido amigo y miembro de la iglesia, que falleció luego de una larga vida de amor y servicio. En el funeral, sus hijos se levantaron uno por uno a contar historias referentes a su padre y pronto pudo notarse un tema común: que su más singular y extraordinaria cualidad fue su voluntad para servir a otros, sin importar cuál fuera la necesidad.