27.6 C
Miami
viernes, julio 19, 2024
Más


    Génesis 30 - Biblia de nuestro Pueblo

    1. Vio Raquel que no daba hijos a Jacob, y envidiosa de su hermana, Raquel dijo a Jacob: -¡Dame hijos o me muero!

    2. Se indignó Jacob con Raquel y le dijo: -¿Hago yo las veces de Dios para negarte el fruto del vientre?

    3. Ella replicó: -Ahí tienes a mi sierva Bilha. Acuéstate con ella para que dé a luz en mis rodillas. Así, por ella, yo también tendré hijos.

    4. Y le entregó a su sierva Bilha como esposa. Jacob se acostó con ella;

    5. ella concibió, dio a luz un hijo para Jacob.

    6. Raquel comentó: -Dios me ha hecho justicia y me ha escuchado y me ha dado un hijo. Por eso lo llamó Dan.

    7. Volvió a concebir Bilha, criada de Raquel, y dio a luz un segundo hijo para Jacob.

    8. Raquel comentó: -Una competición divina: he competido con mi hermana y la he podido. Y lo llamó Neftalí.

    9. Viendo Lía que había cesado de dar a luz, tomó a su criada Zilpa y se la dio a Jacob como mujer.

    10. Zilpa, criada de Lía, dio a luz un hijo para Jacob.

    11. Lía comentó: -¡Qué suerte! Y lo llamó Gad.

    12. Zilpa, criada de Lía, dio a luz un segundo hijo para Jacob.

    13. Y Lía comentó: -¡Qué felicidad! Las mujeres me felicitarán. Y lo llamó Aser.

    14. Durante la cosecha del trigo fue Rubén al campo y encontró unas mandrágoras; y se las llevó a su madre Lía. Raquel dijo a Lía: -Dame algunas mandrágoras de tu hijo.

    15. Y le contestó: -¿Te parece poco quitarme a mi marido, que me quieres quitar también las mandrágoras de mi hijo? Replicó Raquel: -Bueno, que duerma contigo esta noche a cambio de las mandrágoras de tu hijo.

    16. Cuando Jacob volvía del campo al atardecer, Lía le salió al encuentro y le dijo: -Acuéstate conmigo, que he pagado por ti con las mandrágoras de mi hijo. Aquella noche la pasó con ella.

    17. Dios escuchó a Lía, que concibió y dio a luz el quinto hijo para Jacob.

    18. Lía comentó: -Dios me ha pagado el haberle yo dado mi criada a mi marido. Y lo llamó Isacar.

    19. Volvió a concebir Lía y dio a luz para Jacob el sexto hijo.

    20. Lía comentó: -Dios me ha hecho un buen regalo. Ahora me honrará mi marido, pues le he dado seis hijos. Y lo llamó Zabulón.

    21. Después dio a luz una hija y la llamó Dina.

    22. Dios se acordó de Raquel, Dios la escuchó y la hizo fecunda.

    23. Ella concibió, dio a luz y comentó: -Dios ha borrado mi afrenta.

    24. Y lo llamó José, diciendo: -El Señor me dé otro hijo.

    Tretas de Jacob y de Labán

    25. Jacob y Labán Sab 10,11 Cuando Raquel dio a luz a José, Jacob dijo a Labán: -Déjame volver a mi lugar y a mi tierra.

    26. Dame las mujeres por las que te he servido, y los hijos, y me marcharé; tú sabes lo mucho que te he servido.

    27. Labán le respondió: -¡Por favor! He sabido por un oráculo que el Señor me ha bendecido por tu causa.

    28. Señala tu salario y te lo pagaré.

    29. Le replicó: -Tú sabes cómo te he servido y cómo le ha ido al rebaño que me has confiado.

    30. Lo poco que antes tenías ha crecido inmensamente porque el Señor te ha bendecido por mi causa. Es hora de que haga algo también por mi familia.

    31. Le preguntó: -¿Qué quieres que te dé? Contestó Jacob: -No me des nada. Sólo haz lo que te digo, que yo volveré a pastorear y guardar tu rebaño.

    32. Pasaré hoy por todo el rebaño y aparta todas las ovejas oscuras y todos los cabritos manchados; ése será mi salario.

    33. Así mañana, cuando llegue el momento de pagarme, mi honradez responderá por mí: si llego a tener en mi poder algún cabrito no manchado o alguna cordera que no sea oscura en mi poder serán robados.

    34. Respondió Labán: -Está bien, sea lo que tú dices.

    35. El mismo día apartó todos los cabritos rayados o manchados y todas las cabras manchadas o con manchas blancas y todas las corderas oscuras, y se las confió a sus hijos.

    36. Labán se alejó unas tres jornadas de camino mientras Jacob pastoreaba el resto del rebaño de Labán.

    37. Jacob tomó unas ramas verdes de álamo, almendro y plátano, peló en ellas tiras blancas descubriendo lo blanco de las ramas,

    38. y colocó las ramas peladas en los bebederos. Allí era donde los machos se unían con las hembras cuando venían a beber.

    39. Lo hacían frente a las varas y las cabras parían crías rayadas o manchadas.

    40. Jacob apartó las ovejas y las apareó con machos oscuros o rayados y mantuvo separado su rebaño sin mezclarlo con el de Labán.

    41. Cuando los animales más robustos entraban en celo, colocaba las varas frente al ganado en el bebedero, para que se apareasen frente a las varas.

    42. Cuando los animales eran débiles, no lo hacía de modo que los débiles eran para Labán y los robustos para Jacob. Y resultó que el ganado débil le tocó a Labán, el robusto a Jacob.

    43. De este modo se enriqueció muchísimo: tenía muchos rebaños, siervos y siervas, camellos y asnos.