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domingo, agosto 18, 2024
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    Deuteronomio 18 - Biblia Castilian 2003

    Las porciones de los levitas

    1. Los sacerdotes lev ticos, toda la tribu de Lev, no tendrán parte ni heredad con Israel: comerán de los sacrificios ofrecidos a Yahveh y de su patrimonio.

    2. No tendrán heredad en medio de sus hermanos: Yahveh es su heredad, según él les ha dicho.

    3. Éste será el derecho de los sacerdotes sobre el pueblo, sobre aquellos que ofrezcan en sacrificio un buey o un carnero: darán al sacerdote la espaldilla, las quijadas y el cuajar.

    4. Le darás las primicias de tu trigo, de tu mosto y de tu aceite, y las primicias del esquileo de tu reba o;

    5. pues a él y a sus hijos ha escogido Yahveh, tu Dios, de entre todas tus tribus, para que esté a su servicio, en nombre de Yahveh, él y sus hijos, por siempre.

    6. Si un levita llega de una de tus ciudades o de cualquier sitio de Israel, donde habitualmente mora, y siente el vivo deseo de entrar en el lugar que habrá escogido Yahveh,

    7. ejercerá su ministerio en nombre de Yahveh, su Dios, como todos sus hermanos levitas que estén all delante de Yahveh,

    8. y comerá una porción igual a la de los otros, aparte de lo que reciba por la venta de sus bienes patrimoniales.

    Amonestación contra costumbres paganas

    9. Cuando hayas entrado en la tierra que te da Yahveh, tu Dios, no aprenderás a practicar las abominaciones de esas naciones,

    10. y no ha de haber entre vosotros nadie que haga pasar a su hijo o a su hija por el fuego, ni quien se dé a la adivinación, a la observación de las nubes, a la magia, a la hechicer a;

    11. nadie que se dedique al encantamiento, ni consulte esp ritus y adivinos, ni evoque a los muertos.

    12. Es una abominación ante Yahveh cualquiera que haga esto; por tales abominaciones arroja Yahveh, tu Dios, a esas naciones de delante de ti.

    13. Tú has de ser irreprensible frente a Yahveh, tu Dios.

    14. Esas naciones que tú vas a expulsar escuchan a los observadores de nubes y a los adivinos, pero a ti nada de eso te permite Yahveh, tu Dios.

    Dios promete un profeta como Moisés

    15. Yahveh, tu Dios, te suscitará de en medio de ti, de entre tus hermanos, un profeta como yo; a él escucharéis.

    16. Es lo que pediste a Yahveh, tu Dios, en el Horeb, el d a de la asamblea, diciendo: "No vuelva yo a o r la voz de Yahveh, mi Dios, ni a ver más ese gran fuego, para no morir".

    17. Me dijo Yahveh: "Está bien lo que han dicho.

    18. Yo les suscitaré de en medio de sus hermanos un profeta como tú; pondré mis palabras en su boca y él les comunicará todo lo que yo le mande.

    19. A quien no escuchare mis palabras, las que él pronunciará en mi nombre, yo le pediré cuenta de ello.

    20. Pero el profeta que osare decir en mi nombre cosas que yo no he mandado, o hable en nombre de otros dioses, ese profeta morirá".

    21. Y si dices en tu corazón: "¿Cómo reconoceremos que es la palabra de Yahveh?".

    22. Si el profeta habla en nombre de Yahveh, pero no se cumple ni se realiza lo que dice, Yahveh no ha dicho esa palabra. El profeta habló por arrogancia. No le temas.