33 C
Miami
viernes, julio 19, 2024
Más


    Ezequiel 24 - Biblia Castilian 2003

    Parábola de la olla hirviente

    1. El a o noveno, el d a diez del décimo mes, fue dirigida la palabra de Yahveh en estos términos:

    2. "Hijo de hombre, escribe la fecha de este d a, del d a de hoy. Hoy mismo, el rey de Babilonia ha atacado a Jerusalén".

    3. "Propondrás, pues, una parábola a la casa de Israel y les dirás: as dice el Se or Yahveh: "Arrima la olla al fuego, arr mala y échale agua también.

    4. Llénala de trozos de carne, de todos los trozos mejores, pernil y espaldilla; llénala también de huesos selectos.

    5. Toma lo mejor del reba o. Apila luego la le a debajo. Hazla hervir a borbotones hasta que los huesos se cuezan en ella".

    6. Porque as dice el Se or Yahveh: "¡Ay de la ciudad sanguinaria, olla que tiene cardenillo, cardenillo que no se le va! Saca afuera trozo a trozo, sin echarlos a suertes.

    7. Porque la sangre está dentro de ella, sobre una roca desnuda la puso, no la derramó en tierra, para que la cubriera el polvo.

    8. Para provocar mi ira, para tomar venganza, puse su sangre sobre roca desnuda que no pueda cubrirse".

    9. Por eso as dice el Se or Yahveh: "¡Ay de la ciudad sanguinaria! También yo haré una gran hoguera.

    10. Echa más le a, enciende el fuego, cuece la carne, echa el condimento y que se quemen los huesos.

    11. Colócala vac a sobre las brasas, para que se caliente, se ponga al rojo el cobre, se funda dentro de ella la ro a, se le consuma el cardenillo"."

    12. "¡Esfuerzo agotador! Ni aun con el fuego se le quita su espesa ro a. La ro a

    13. es tu inmunda impureza. Puesto que he querido limpiarte y no te has dejado limpiar de tu inmundicia, no quedarás ya limpia hasta que desahogue en ti mi furor.

    14. Yo, Yahveh, he hablado; está para llegar y lo haré. No cejaré, no sentiré pena ni me arrepentiré. Te juzgarán según tu conducta y según tus acciones - oráculo del Se or Yahveh."

    Muerte de la esposa de Ezequiel

    15. Me fue dirigida la palabra de Yahveh en estos términos:

    16. "Hijo de hombre, mira: voy a quitarte la que es el encanto de tus ojos; pero no te lamentes ni llores ni corran tus lágrimas.

    17. Gime en silencio y no hagas duelo por los muertos, cúbrete con el turbante y ponte las sandalias; no te tapes la barba ni comas pan de luto".

    18. Hablé al pueblo por la ma ana, y por la tarde murió mi mujer. A la ma ana siguiente hice como se me hab a mandado.

    19. Entonces el pueblo me dijo: "¿No quieres explicarnos qué significan para nosotros estas cosas que están haciendo?".

    20. Yo les contesté: "Me ha sido dirigida la palabra de Yahveh en estos términos:

    21. "Di a la casa de Israel: as dice el Se or Yahveh: mirad: voy a profanar mi santuario, orgullo de vuestra potencia, encanto de vuestros ojos, y anhelo de vuestras almas; y vuestros hijos y vuestras hijas, los que habéis dejado, caerán a espada".

    22. Haréis como yo hice: no os taparéis la barba ni comeréis pan de luto.

    23. Llevaréis turbantes en la cabeza y sandalias en los pies; no os lamentaréis ni lloraréis, pero os consumiréis por vuestras iniquidades y gemiréis los unos con los otros.

    24. Ezequiel será para vosotros un s mbolo; haréis en todo como él ha hecho. Cuando esto llegue, sabréis que yo soy el Se or Yahveh".

    25. "En cuanto a ti, hijo de hombre, el d a en que yo les quite su baluarte, la alegr a de su gloria, el encanto de sus ojos, el anhelo de sus almas, a sus hijos y a sus hijas,

    26. ese d a llegará a ti un fugitivo para darte una noticia.

    27. Ese d a se te abrirá la boca para hablar con el fugitivo; hablarás y ya no volverás a estar mudo. As serás para ellos un s mbolo, y sabrán que yo soy Yahveh."