Isaías 11 - Biblia Castilian 2003

Reinado justo del Mesías

1. Saldrá un renuevo del tronco de Jesé, un tallo brotará de sus ra ces.

2. Reposará sobre él el esp ritu de Yahveh, esp ritu de sabidur a y de inteligencia, esp ritu de consejo y de fortaleza, esp ritu de ciencia y de temor de Yahveh.

3. Se complacerá en el temor de Yahveh. No juzgará por las apariencias, no decidirá de o das.

4. Juzgará con justicia a los m seros, sentenciará con rectitud a los pobres de la tierra. Herirá al violento con la vara de su boca, matará al imp o con el aliento de sus labios.

5. Será la justicia ce idor de su cintura y la fidelidad ce idor de sus caderas.

6. Morará el lobo con el cordero, el leopardo con el cabrito se echará; el ternero y el cachorro del león pacerán juntos; un ni o peque o los conducirá.

7. La vaca pastará con la osa, juntas se echarán sus cr as; el león, como el buey, comerá paja.

8. El lactante jugará en la hura de la v bora, en la madriguera del áspid meterá su mano el recién destetado.

9. Nadie hará mal, nadie hará da o en toda mi santa monta a, porque el pa s estará lleno del conocimiento de Yahveh, como las aguas colman el mar.

10. Sucederá en aquel d a; la ra z de Jesé se erguirá como estandarte de los pueblos, la buscarán las naciones, y gloriosa será su morada.

11. Sucederá en aquel d a: el Se or hará un segundo gesto con su mano para rescatar al resto de su pueblo: los que hayan quedado de Asiria y de Egipto, de Patrós, de Cus y de Elam, de Sinar, de Jamat y de las islas del mar.

12. Alzará un estandarte a las naciones, reunirá a los dispersos de Israel, a los desperdigados de Judá recogerá de los cuatro extremos de la tierra.

13. Cesará la envidia de Efra n, y los opresores de Judá serán exterminados. Efra n no envidiará a Judá y Judá no oprimirá a Efra n.

14. Se lanzarán sobre la espalda de los filisteos a occidente, juntos saquearán a los hijos de oriente; Edom y Moab serán presa de su mano, y los hijos de Amón serán sus vasallos.

15. Yahveh secará el golfo del mar de Egipto; agitará su mano contra el R o, con el ardor de su soplo lo dividirá en siete cauces que se cruzarán con sandalias.

16. Habrá una calzada para el resto de su pueblo que haya quedado en Asiria, como lo hubo para Israel el d a en que subió del pa s de Egipto.