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jueves, julio 18, 2024
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    Jeremías 49 - Jünemann Septuaginta en español

    Profecía sobre los amonitas

    1. Profecía sobre Amón, Edom, Damasco, árabes y elamitas A los hijos de Amón. Así dijo el Señor: «¿Acaso hijos no hay en Israel o quien herede, no tienen? ¿por qué ha heredado Melcom a Gad, y el pueblo de ellos en sus ciudades habitará?

    2. Por esto, he aquí días vienen, dice el Señor y resonaré sobre Rablat tumulto de guerras; y serán en intransitable y en perdición; y sus aras en el fuego serán quemadas; y heredará Israel el principado de él.

    3. Ulula, Hesebón, porque ha perecido [Hai]; vocead, hijas de Rablat, vestíos sacos y heríos; pues Melcom, en transmigración irá, y sus sacerdotes y sus príncipes juntamente.

    4. ¿Qué os alborozáis en las campiñas de «los gigantes»? hija de impudencia, la confiada en sus tesoros; la que decías: «¿Quién vendrá sobre mí?»

    5. He aquí yo traigo temor sobre ti, dijo el Señor, de toda tu circunvecindad y os dispersaréis cada uno a su faz; no hay quien congregue.

    6. [Y después de esto volveré los cautivos de los hijos de Amón, dice el Señor].

    Profecía sobre Edom

    7. A la Idumea: Esto dice el Señor: «No hay ya sabiduría en Temán;(a) pereció consejo de entre prudentes; se fue sabiduría de ellos;

    8. conculcado ha sido el lugar de ellos(b); ahondad para asiento(c) los que habitáis en Dedán; que pesadas cosas ha hecho(d); he traído sobre él(e) en tiempo que he visitado sobre él;

    9. pues vendimiadores han venido, que no te dejarán rastrojo; como ladrones de noche pondrán encima su mano.

    10. Que yo he derribado a Esaú, descubierto lo oculto de ellos; ocultarse no podrán, no; han perecido por mano del hermano de él, vecino mío;

    11. y no hay como quede huérfano que viva; y yo haré vivir, y viudas en mí confían.

    12. Porque esto dijo el Señor: «Los que no tenían ley de beber el cáliz, bebieron, y tú absuelta(f) no serás absuelta;

    13. que por mí mismo he jurado, dice el Señor; pues en intransitable y en oprobio y en maldición serás en medio de ella, y todas las ciudades de ella estarán desiertas por siglo.

    14. Oída he oído del Señor, y ángeles a las gentes envió: «Congregaos y llegad a ella; levantaos en guerra».

    15. Pequeño te he dado entre gentes, despreciable entre hombres.

    16. Tu arrogancia hase apoderado de ti; impudencia de tu corazón habitó cavernas de peñas; tomó fuerza de colina excelsa —pues exaltó así como águila su nido—; de allí te derribaré.

    17. Y será la Idumea en intransitable; todo transeúnte sobre ella silbará.

    18. Así como fue trastornada Sodoma y Gomorra y sus vecinas, dijo el Señor Omnipotente, no se asentará, no, allí hombre; y no habitará, no, allí hijo de hombre.

    19. He aquí como león ascenderá(g) de en medio del Jordán hasta el lugar de las Peñas; pues rápidamente los perseguiré de él; y a los jovencillos sobre él constituid(h). Pues ¿quién como yo? ¿y quién me resistirá? Y ¿quién es ese pastor que se pondrá ante mi faz?

    20. Por esto oíd la determinación que determinó sobre la Idumea, y su pensamiento que pensó sobre los habitantes de Temán: «¡Si no fueren arreadas las(i) más pequeñas de las ovejas!... ¡Si no fuere hecha intransitable sobre ella la morada de ellos!...;

    21. pues a la voz de su caída se amedrentó la tierra; y estruendo de mar no se oyó.(j)

    22. He aquí, tal como águila, mirará y extenderá las alas sobre las fortificaciones de ella(k); y estará el corazón de los fuertes de la Idumea en aquel día como corazón de mujer parturiente».

    Profecía sobre Damasco

    23. A Damasco: «Avergonzada está Emat y Arfad; pues han oído oída mala: pasmáronse, enfureciéronse(l); reposar no podrán, no.

    24. Desmayóse Damasco; se volvió a la fuga; temblor la cogió(m).

    25. ¿Cómo no dejó mi ciudad, aldea amaron?(n)

    26. Por esto caerán jovencillos en tus calles, y todos los varones, los guerreros tuyos, caerán, dice el Señor;

    27. y encenderé fuego en los muros de Damasco, y devorará encrucijadas(o) de Benadad».

    Profecía sobre Cedar y Hazor

    28. A Cedar la reina del Aula(p), que percutió Nabucodonosor, rey de Babilón. Así dijo el Señor: «Levantaos y subid a Cedar, e invadid a los hijos de oriente.

    29. Sus tiendas y sus ovejas, serán llevadas; sus vestiduras y todos sus vasos y sus camellos les serán llevados; y llamad sobre ellos perdición de en contorno.

    30. Huid; sobremanera ahondad para asiento, sentados en el Aula; pues ha deliberado sobre vosotros rey de Babel deliberación y pensado pensar.

    31. Levántate y sube sobre gente tranquila sentada en refrigerio; que no tienen puertas, no cerraduras, no cerrojos: solos moran.

    32. Y serán sus camellos en botín, y muchedumbre de sus ganados en perdición; y los aventaré con todo viento, rapados(q) ante la faz de ellos; de todo confín de ellos traeré su derribamiento, dijo el Señor.

    33. Y será el Aula morada de avestruces, e intransitable por siglo; no se asentará allí hombre, no; y no habitará allí hijo de hombre, no.

    Profecía sobre Elam

    34. Lo que profetizó Jeremías sobre las gentes, las de Elam(r):

    35. Esto dice el Señor: «Quebrado ha sido el arco de Elam, principado del poderío de ellos.

    36. Y traeré sobre Elam cuatro vientos desde las cuatro sumidas del cielo y les dispersaré por todos estos vientos; y no habrá gente que no llegue allí: los lanzados de Elam.

    37. Y les aterraré delante de los enemigos de ellos, los que buscan su alma, y traeré(s) sobre ellos, según la ira de mi furor, y enviaré tras ellos mi cuchilla hasta aniquilarlos.

    38. Y pondré mi trono en Elam, y enviaré desde allí rey y magnates.

    39. Y será en el postrero de los días: volveré la cautividad de Elam, dice el Señor.