29.2 C
Miami
jueves, julio 18, 2024
Más


    Ester 4 - Versión Israelita Nazarena 2011

    Ester promete interceder por su pueblo

    1. Cuando Mordekhay se enteró de todo lo que había sucedido, Mordekhay desgarró sus vestiduras, se vistió de luto y de ceniza. Se fue por la ciudad gritando con fuerza y amargura,

    2. hasta que llegó frente a la puerta del palacio; pues no se podía pasar por la puerta real vestido de luto.

    3. –Además, en cada provincia a donde llegaba la orden y el decreto del rey, había gran duelo entre los yahuditas, con ayuno, llanto y lamentación; y todo el mundo yacía en luto y ceniza–.

    4. Cuando las jóvenes de Ester y sus eunucos fueron y se lo informaron, la reina se estremeció muchísimo. Ella envió ropa para que Mordekhay se vistiera y se quitara el luto; pero él no la aceptó.

    5. Entonces Ester llamó a Hatakh, uno de los eunucos que el rey había puesto al servicio de ella, y lo envió a Mordekhay para saber qué sucedía y por qué.

    6. Hatakh salió y fue donde Mordekhay, a la plaza de la ciudad, frente a la puerta real;

    7. y Mordekhay le contó todo lo que le había sucedido, y lo del dinero que Hamán había ofrecido pagar para la tesorería real por la destrucción de los yahuditas.

    8. También le dio una copia del decreto que se había promulgado en Shushán para la destrucción de ellos. [Le pidió] que se la mostrara a Ester, le informara y le encargara que fuese a donde el rey para suplicarle e interceder ante él por su pueblo.

    9. Cuando Hatakh regresó y le entregó a Ester el mensaje de Mordekhay,

    10. Ester le dijo a Hatakh que le llevara a Mordekhay la siguiente respuesta:

    11. “Todos los cortesanos del rey y el pueblo de las provincias del rey saben que si alguna persona, hombre o mujer, entra a la presencia del rey en el patio interior sin que lo hayan llamado, hay una sola sentencia: que se le dé muerte. Solamente si el rey le extiende el cetro de oro, podrá vivir. Y a mí no me han llamado para visitar al rey en los últimos treinta días”.

    12. Cuando le dijeron a Mordekhay lo que había dicho Ester,

    13. Mordekhay mandó que le respondieran a Ester: “No te imagines que porque estás en el palacio del rey serás la única de todos los yahuditas que va a escapar con vida.

    14. Al contrario, si te quedas callada en esta crisis, el alivio y la liberación de los yahuditas vendrán de otro lugar; pero tú y la casa de tu padre perecerán. ¡Y quién sabe si para una crisis como ésta fue que lograste una posición real!”

    15. Entonces Ester le envió esta respuesta a Mordekhay:

    16. “Ve, reúne a todos los yahuditas que viven en Shushán, y ayunen por mí; no coman ni beban en tres días, ni de noche ni de día. Yo también ayunaré con mis doncellas. Después iré donde el rey, aunque sea contrario a la ley; y si perezco, que perezca”

    17. Así que Mordekhay fue [por la ciudad] e hizo tal como le había mandado Ester.