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jueves, julio 18, 2024
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    Hechos 7 - Reina Valera 1858 (Nuevo Testamento)

    Defensa y muerte de Esteban

    1. EL príncipe de los sacerdotes dijo entonces: ¿Es esto así?

    2. Y él dijo: Varones, hermanos, y padres, oíd. El Dios de gloria apareció á nuestro padre Abraham estando en Mesopotamia, antes que morase en Charan,

    3. y le dijo: Sal de tu tierra, y de tu parentela, y ven á la tierra que te mostraré.

    4. Entonces salió de la tierra de los Chaldéos, y habitó en Charan: y de allí, muerto su padre, le traspasó á esta tierra, en la cual vosotros habitais ahora.

    5. Y no le dió posesion en ella, ni aun una pisada de un pié: mas le prometió que se la daria en posesion, y á su simiente despues de él, no teniendo aun hijo.

    6. Y le habló Dios así: Que su simiente seria extranjera en tierra ajena, y que los sujetarian en servidumbre, y que los maltratarian, por cuatrocientos años:

    7. mas á la nacion á quien serán siervos, yo la juzgaré, dijo Dios: y despues de esto saldrán, y me servirán en este lugar.

    8. Y le dió el concierto de la circuncision: y así engendró á Isaac, y le circuncidó al octavo dia: é Isaac á Jacob, y Jacob á los doce patriarcas.

    9. Y los patriarcas, movidos de envidia, vendieron á Joseph para Egipto: mas Dios era con él;

    10. y le libró de todas sus tribulaciones, y le dió gracia y sabiduría en la presencia de Pharaón, rey de Egipto, el cual le puso por gobernador sobre Egipto, y sobre toda su casa.

    11. Vino entonces hambre en toda la tierra de Egipto y de Chanaán, y grande tribulacion: y nuestros padres no hallaban alimentos.

    12. Y como oyese Jacob que habia trigo en Egipto, envió á nuestros padres la primera vez.

    13. Y en la segunda, Joseph fué conocido de sus hermanos, y fué sabido de Pharaón el linaje de Joseph.

    14. Y enviando Joseph, hizo venir á su padre Jacob, y á toda su parentela, en setenta y cinco personas.

    15. Así descendió Jacob en Egipto, donde murió él, y nuestros padres,

    16. los cuales fueron traspasados á Sichém, y fueron puestos en el sepulcro que compró Abraham á precio de dinero de los hijos de Hemór, hijo de Sichém.

    17. Mas como se acercó el tiempo de la promesa la cual Dios habia jurado á Abraham, creció el pueblo, y se multiplicó en Egipto,

    18. hasta que se levantó otro rey, que no conocia á Joseph.

    19. Este, usando de astucia con nuestro linaje, maltrató á nuestros padres, que pusiesen á peligro de muerte sus niños, para que cesase la generacion.

    20. En aquel mismo tiempo nació Moisés, y fué agradable á Dios: y fué criado tres meses en casa de su padre.

    21. Mas siendo puesto al peligro, la hija de Pharaón le tomó, y le crió por su hijo.

    22. Y fué enseñado Moisés en toda la sabiduría de los Egipcios: y era poderoso en sus dichos y hechos.

    23. Y como se le cumplió el tiempo de cuarenta años, le vino en voluntad de visitar á sus hermanos los hijos de Israél.

    24. Y como vió á uno que era injuriado, le defendió, é hiriendo al Egipcio, vengó al injuriado.

    25. Pero él pensaba que sus hermanos entendian, que Dios les habia de dar salud por su mano: mas ellos no lo hablan entendido.

    26. Y el dia siguiente riñiendo ellos, se les mostró, y los metia en paz, diciendo: Varones, hermanos sois, ¿por qué os injuriais los unos á los otros?

    27. Entonces el que injuriaba á su prójimo, le rempujó, diciendo: ¿Quién te ha puesto á tí por príncipe y juez sobre nosotros?

    28. ¿quieres tú matarme, como mataste ayer al Egipcio?

    29. A esta palabra Moisés huyó: y se hizo extranjero en tierra de Madián, donde engendró dos hijos.

    30. Y cumplidos cuarenta años, el ángel del Señor le apareció en el desierto del monte de Sinaí, en fuego de llama de un zarzal.

    31. Entonces Moisés mirando, fué maravillado de la vision: y llegándose para considerar, fué hecha á él voz del Señor:

    32. Yo soy el Dios de tus padres, el Dios de Abraham, y Dios de Isaac, y Dios de Jacob: mas Moisés temeroso no osaba mirar.

    33. Y le dijo el Señor: Quita los zapatos de tus piés, porque el lugar en que estás tierra santa es:

    34. he visto, he visto la afliccion de mi pueblo que está en Egipto, y el gemido de ellos he oido, y he descendido para librarlos: ahora pues ven, te enviaré á Egipto.

    35. A este Moisés, al cual habian rehusado, diciendo: ¿Quién te ha puesto por príncipe y juez? á este envió Dios por príncipe y redentor con la mano del ángel que le apareció en el zarzal.

    36. Este los saco, haciendo prodigios y milagros en la tierra de Egipto, y en el mar Bermejo, y en el desierto por cuarenta años.

    37. Este es el Moisés, el cual dijo á los hijos de Israél: Profeta os levantará el Señor Dios vuestro, de vuestros hermanos, como yo; á él oireis.

    38. Este es el que estuvo en la congregacion en el desierto con el ángel que le hablaba en el monte de Sinaí, y con nuestros padres: y recibió las palabras de vida para darnos.

    39. Al cual nuestros padres no quisieron obedecer: antes le desecharon; y se apartaron de corazon á Egipto,

    40. diciendo á Aarón: Haznos dioses que vayan delante de nosotros: porque á este Moisés, que nos sacó de tierra de Egipto, no sabemos que le ha acontecido.

    41. Y entonces hicieron el becerro, y ofrecieron sacrificio al ídolo, y en las obras de sus manos se holgaron.

    42. Mas Dios se apartó, y los entregó que sirviesen al ejército del cielo, como está escrito en el libro de los profetas: ¿Me ofrecisteis víctimas y sacrificios en el desierto por cuarenta años, casa de Israél?

    43. antes trajisteis el tabernáculo de Moloch, y la estrella de vuestro dios Remphan, figuras que os hicisteis para adorarlas: os trasportaré pues de ese cabo de Babilonia.

    44. Tuvieron nuestros padres el tabernáculo del testimonio en el desierto, como les ordenó Dios, hablando á Moisés, que le hiciese segun la forma que habia visto.

    45. El cual recibido, metieron tambien nuestros padres con Josué en la posesion de los Gentiles, que Dios echó de la presencia de nuestros padres, hasta los dias de David.

    46. El cual halló gracia delante de Dios, y pidió de hallar tabernáculo al Dios de Jacob.

    47. Y Salomón le edificó casa.

    48. Mas el Altísimo no habita en templos hechos de mano, como el profeta dice:

    49. El cielo es mi trono; y la tierra el estrado de mis piés: ¿qué casa me edificareis? dice el Señor: ¿ó cual es el lugar de mi reposo?

    50. ¿no hizo mi mano todas estas cosas?

    51. Duros de cerviz, é incircuncisos de corazon y de oidos: vosotros resistís siempre al Espíritu Santo; como vuestros padres así tambien vosotros.

    52. ¿A cuál de los profetas no persiguieron nuestros padres? y mataron á los que antes denunciaron la venida del Justo, del cual vosotros ahora habeis sido entregadores y matadores:

    53. que recibisteis la ley por disposicion de ángeles, y no la guardasteis.

    54. Y oyendo estas cosas regañaban de sus corazones, y crujian los dientes contra él.

    55. Mas él estando lleno de Espíritu Santo, puestos los ojos en el cielo, vió la gloria de Dios, y á Jesus que estaba á la diestra de Dios,

    56. y dice: Hé aquí, veo los cielos abiertos, y al Hijo del hombre que está á la diestra de Dios.

    57. Entonces ellos dando grandes voces, taparon sus orejas; y arremetieron unánimes contra él.

    58. Y echándole fuera de la ciudad le apedreaban: y los testigos pusieron sus vestidos á los piés de un mancebo que se llamaba Saulo.

    59. Y apedrearon á Estévan, invocando él, y diciendo: Señor Jesus, recibe mi espíritu.

    60. Y puesto de rodillas, clamó á gran voz: Señor, no les pongas este pecado. Y habiendo dicho esto, durmió en el Señor.